Análisis de The Callisto Protocol - La nave del misterio

El terror espacial apunta a ser la nueva moda del mundo de los videojuegos, dejando atrás la de temática nórdica. Ya se pudo ver en la pasada Gamescom 2022, donde muchos de los títulos que se presentaron en aquel entonces respiraban este ambiente que se había perdido hace algunos años y que encumbró una licencia tan conocida como efímera: Dead Space. Ante esta tónica que empieza a tomar la industria, Electronic Arts no iba a ser menos y el remake de la primera entrega llegará el próximo mes de enero. No obstante, un sucesor espiritual le ha tomado la delantera para comenzar esta senda hacia el futuro -o el pasado, según se mire.

The Callisto Protocol ya lleva unos días entre nosotros y, aunque hemos tardado en traer nuestro análisis, ya estamos preparados para ofrecerte todas las impresiones que nos ha dejado este título que apuntaba tan alto desde sus primeros esbozos. ¿Está a la altura de la leyenda? ¿Es capaz de ponerse al nivel de un nombre tan ilustre como el de Dead Space? Pues a todas esas preguntas intentaré responder en las siguientes líneas, aunque aquí tienes las conclusiones iniciales y bien masticadas para que sepas a lo que te enfrentarás si es que aún no te has decidido.

• The Callisto Protocol: toda la información
• Experiencia con The Callisto Protocol
  • La esperar para el verdadero terror espacial tendrá que prolongarse
  • Un combate algo soso y sin excesivas sorpresas
  • Un diseño de niveles de otra época
  • De lo mejor que ha llegado a nivel visual en la nueva generación
• Valoración final de The Callisto Protocol

The Callisto Protocol: toda la información

The Callisto Protocol es un juego de acción y terror espacial de la mano del estudio Striking Distance Studios, siendo su juego debut en la industria. Con su lanzamiento el 2 de diciembre de 2022, se trata de un título exclusivo de la nueva generación de consolas, por lo que solo está disponible en PS5, Xbox Series X|S y PC. Se trata de una propuesta que pretende emular la experiencia de otros grandes títulos como Dead Space y cuenta con una traducción completa al español, tanto en las voces como en los textos.

Experiencia con The Callisto Protocol

Había hecho mucho ruido previo a su lanzamiento y no era para menos. The Callisto Protocol se postulaba como una enorme alternativa para una franquicia tan grande como Dead Space y a ser el impulsor del género de terror espacial. Su aspecto es apabullante y cuenta con una calidad inmensa entre sus diferentes escenarios, pero la experiencia es buena, sin más. No es el megatón que podrían esperar muchos usuarios y no cuenta con esa atmósfera aterradora que encumbró a la obra de Electronic Arts. The Callisto Protocol se pierde entre la acción y la falta de ideas y se queda en un notable, cuando apuntaba a matrícula de honor.

La esperar para el verdadero terror espacial tendrá que prolongarse

The Callisto Protocol se define como un juego de terror, aunque no lo explota demasiado.

The Callisto Protocol es una excelente experiencia que, de hecho, recomiendo a todo aquel que quiera disfrutar de un juego de ciencia ficción con elementos sobrenaturales. No obstante, aunque huelgue decir que se trata de un buen juego, no he conseguido experimentar el terror en ninguna de las 15 horas que ha durado mi aventura junto a Jacob Lee. Algún que otro sustito de los predecibles, pero poco más. Si Striking Distance Studios quería destacarse en estas lides, creo que solo se han quedado en su excelente ambientación.

Superado el trauma al darme cuenta de que no estaba ante un juego de terror y que ni siquiera era necesario andarme con cuidado detrás de cada esquina, ya que los encuentros con los enemigos son de lo más intuibles, he de decir que he sido capaz de dsifrutar -y mucho- de lo que me he encontrado en The Callisto Protocol. Tal vez no sea un juego de terror espacial como lo fue Dead Space, pero funciona como videojuego de acción con pequeños momentos que te pueden hacer pegar un brinco del asiento. Por supuesto, no era lo que esperaba el público general respecto a la obra, pero al menos cumple con lo básico.

Y esto se traduce en escasez de recursos, una ambientación fenomenal que recuerda a los grandes del género y una propuesta argumental que, si bien resulta algo floja, al menos entretiene. The Callisto Protocol ha abierto la veda de la nueva moda de los videojuegos, pero para que llegue el auténtico terror espacial tocará esperar, probablemente, hasta el próximo mes de enero cuando regrese el rey que lo inició todo. Y, aunque las comparaciones son odiosas, en este caso son más que evidentes.

Un combate algo soso y sin excesivas sorpresas

El combate cuenta con elementos realmente buenos y atractivos.

Vayamos pues al elemento principal de The Callisto Protocol, que no es otro que el combate. Nos encontramos ante una propuesta lineal en todos sus capítulos, por lo que hay poco lugar para la exploración y, en los primeros compases, casi que tampoco para el combate. Da la sensación de que el juego te prepara en exceso para lo que viene en la segunda mitad del título: una acción desenfrenada, porque los encuestros con enemigos de las primeras 3-4 horas son prácticamente un chiste. Vienen siempre de uno en uno y de dos en dos, como diciendo "ven, párteme la cara, que hoy tengo ganas de fiesta de vísceras".

El título empieza a soltarse cuando Jacob dispone de todo su arsenal: una porra eléctrica, una pistola, el GAR (un artilugio capaz de atraer a los enemigos) y su traje molón que luce en la portada. Esto le resta algo de emoción al título, porque cuando se podía convertir en una auténtica experiencia survival horror, no termina de explotar y, cuando lo hace, los recursos son tan numerosos que se convierte en un shooter genérico en el que pegar tiros, desmembrar y jugar con las habilidades está a la orden del día. Hay dos partes muy diferenciadas de The Callisto Protocol y ambas están mal ejecutadas en lo que pudo ser y finalmente nunca fue.

Eso sí, como juego de acción consigue funcionar a las mil maravillas en esta segunda parte del juego, donde se quita las vergüenzas y ofrece un festival de disparos, sangre, escenas gore y enemigos ávidos de arrancarte las tripas. No obstante, choca bastante que en este punto de la aventura se tome la decisión de meter con calzador momentos de sigilo que te obligan a romper esa dinámica que iba adquiriendo el juego y que están realmente mal diseñados, porque no aportan nada. Algo que, por cierto, también me ha pasado con el sistema defensivo.

Las ejecuciones son algunos de los momentos más brutales de The Callisto Protocol.

The Callisto Protocol apuesta mucho por el combate cuerpo a cuerpo. Algo que no sorprende, ya que escasean los recursos y en muchas ocasiones hay que recurrir a los puños o a la porra eléctrica. Sin embargo, en estos momentos, el título también incluye un sistema de esquiva que no se explica nada bien y que no es nada intuitivo en los primeros compases. No obstante, la inteligencia artificial de los enemigos es tan pobre que, una vez te acostumbras, resulta siendo un paseo.

Al menos, donde sí que se quita las costuras es con el GAR, el guante telequinético, que te permite hacer ciertas virguerías la mar de gores y divertidas con los enemigos. De hecho, puedes tritutarlos con sierras del entorno o clavarlos en una pared con pinchos, haciendo que todo lo que te rodea sea un elemento más del combate que puede servir de arma, aunque de doble filo, porque aquí también son un peligro para el propio Jacob, algo que se agradece y que aporta más dosis de realismo.

Un diseño de niveles de otra época

Es fácil ver a Jacob arrastrarse por conductos de ventilación.

Ya decía antes que The Callisto Protocol es un juego lineal, pero en el sentido más estricto de la palabra. Striking Distance Studios no se ha esmerado en exceso a la hora de conformar el diseño de niveles, ya que hay algunos demasiado parecidos entre sí y su construcción es nula para la exploración, incluso utilizando técnicos que habían caído en el desuso desde hace una década. Se nota la inspiración del equipo de desarrollo, pero también que no han sabido abandonar esas ideas en pos de otras que se adecúen de mejor modo a la actualidad del sector.

De esta manera, se nota un excesivo empeño por conectar el mapa a la mínima que te desvíes del rumbo que te va marcando el juego sobre raíles. Puertas cerradas que se abren desde otra zona por la que pensabas que podías explorar, un ascensor que se rompe por arte de magia, el deslizamiento hacia una zona central... y un largo etcétera. No hay que preocuparse mucho por estar desviándose del elemento central de la historia, porque tarde o temprano acabas llegando adonde debes en cuestión de escasos minutos. Lo peor de todo esto es que deviarse tampoco aporta grandes beneficios, más allá de algunos créditos, munición o coleccionables.

Obviamente, estas decisiones son totalmente premeditadas para atraer de nuevo esa atmósfera agobiante y claustrofóbica que son el santo y seña de este tipo de videojuegos, pero la falta de imaginación en la construcción de los niveles y en la ejecución de sus enlaces no le hace ningún favor al fabuloso aspecto que luce el título, por lo que se echa en falta algo que arriesgue más y salga de lo plano que resultan la enorme mayoría de los escenarios que encontramos en The Callisto Protocol.

De lo mejor que ha llegado a nivel visual en la nueva generación

El grado de detalle de The Callisto Protocol es impresionante.

Eso sí, no se le puede reprochar a Striking Distance Studios que no lo hayan dado todo en el terreno gráfico. The Callisto Protocol cuenta con dos modos de juego y, aunque siempre aconsejo jugar a 60fps y es un videojuego que se presta totalmente a ello, en esta ocasión tengo que hacer lo contrario. Y es que merece la pena adentrarse en el modo fidelidad y "sufrir" de algún modo los 30fps para comprobar todo el esplendor que puede alcanzar la obra. Una sencilla locura que demuestra el potencial de la nueva generación de consolas, al menos en lo que a PS5 se refiere, plataforma en la que he podido probarlo.

El nivel de detalle, especialmente en los personajes principales es extraordinario, así como en el uso del raytracing y los elementos del entorno regalan una estampa magnífica y que aporta todo el esplendor de cualquier producto audiovisual relacionado con la ciencia ficción. Adentrarte en The Callisto Protocol es hacerlo en la máxima expresión de la nueva generación, aunque ello también conlleva ciertas pantallas de carga camufladas, pero se lo dejo pasar, ya que ha conseguido dejarme con la boca abierta en muchos momentos. Además, en PS5 se mueve como una auténtica roca en cualquiera de los dos modos, por lo que no se experimentan caídas de rendimiento.

Donde no me siento tan permisivo es con el doblaje al español, uno de los más pobres que he presenciado en los últimos años, donde la sincronización labial brilla por su ausencia y la interpretación deja bastante que desear. Al menos, en todo lo relacionado con el diseño de audio sí que se ha realizado un excepcional trabajo, regalando esos momentos tensos en los que la música aporta la dosis de terror que le falta a la propuesta en su conjunto.

Valoración final de The Callisto Protocol

Aunque pueda parecer lo contrario en el transcurso del análisis, he disfrutado y mucho de The Callisto Protocol. En sus primeros compases consiguió atraparme por completo y bebí de su atmósfera, esperando encontrar algo muy similar a la experiencia que me aportó en su día el primer Dead Space. No obstante, aunque he conseguido disfrutarlo, me ha dejado un sabor amargo ante lo que apuntaba a ser en un inicio y su excesivo viraje hacia la acción en la segunda mitad del juego. Creo que es una decisión que no le sienta bien y le hace perder personalidad, perdiéndose entre otros tantos juegos con mecánicas de shooter genérico.

Todo ello, sumado a su diseño de niveles planos, lineal y soso, además de ofrecer un sistema de combate que no inventa la pólvora, dejan a The Callisto Protocol en ese escalón por debajo de las obras maestras y consigue asentarse en un resultado notable que lo convierte en un título disfrutable, peor sin llegar a las altas esferas. Para ello y conseguir experimentar el terror espacial que todo el mundo quiere, tocará seguir esperando a todas esas propuestas que llegarán tras la obra de Striking Distance Studios, a la que tal vez le haya pesado ser la encargada de abrir el camino.

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