Después de jugar 5 niveles de Astro Bot, tengo claro que es justo lo que PS5 necesita
Astro Bot aterriza de manera exclusiva en PS5 el próximo 6 de septiembre y sus primeras impresiones son sensacionales

2024 está siendo un año extraño en lo referente a las exclusivas de PS5. La consola de actual generación de Sony cuenta con muchos proyectos en marcha, pero en este curso se está valiendo de las denominadas second party para sacar adelante el calendario. No obstante, tras el último State of Play emitido por la compañía japonesa se desveló uno de esos títulos que está llamado a ser importante en esta segunda mitad del año: Astro Bot.
Tras el excelente desempeño de Astro's Playroom, la demo que acompaña a PS5 para demostrar las cualidades de la consola y, especialmente, del DualSense, Team Asobi vuelve a la carga con una entrega totalmente nueva y que permite explorar más a fondo todas esas virtudes que dejó entrever esa suerte de demo técnica. Gracias a PlayStation España ya he podido jugar a 5 de los niveles que se darán cita en la propuesta y lo cierto es que las sensaciones que me ha dejado son las de los grandes juegos de plataformas en toda la historia. Astro Bot está preparado para ser la mascota moderna de PlayStation.
Un mundo de diversas sensaciones

Mucho se ha hablado de las excelentes sensaciones que dejó Astro's Playroom a todos aquellos que probaron su experiencia con la compra de una PS5. El título protagonizado por el simpático robot que repasaba la historia de la marca japonesa hasta la fecha era un torrente de emociones y de mecánicas que nada tenían que envidiar a un título completo. Con Astro Bot, ese sueño se hace realidad. Es cierto que solo he podido probar una mínima parte de los numerosos niveles que formarán parte del resultado final del juego, pero lo que me ha aportado con una escasa hora de juego apunta especialmente alto.
Uno de los grandes retos de Astro Bot es conseguir situarse a la altura de otras grandes franquicias del género de plataformas. Es una declaración de intenciones: ya no es solo una demo técnica para mostrar las bondades de la consola, sino que es un videojuego hecho y derecho que quiere enfrentarse a auténticos gigantes. Si Mario y sus videojuegos en 3D son una de las mascotas principales de Nintendo, Astro Bot está preparado para cumplir el mismo papel en PlayStation. Y, por lo que he visto, no me cabe duda de que si se le aporta una gran continuidad, conseguirá plantar cara en este sentido.
Entrando en materia, el equipo de PlayStation nos ha dejado probar algunos de los niveles iniciales del juego que verá la luz el próximo 6 de septiembre. Se nota que forman parte de los primeros compases de la aventura porque el diseño de los mismos está pensado para que puedas aclimatarte de manera rápida y sencilla a los controles y a las novedades que se implementan en el título. Así las cosas, Astro Bot puede golpear con sus puños y girar sobre sí mismo para vencer a sus enemigos. Al mismo tiempo, cuenta con una suerte de soble salto suspendido mediante los propulsores de sus pies para poder llegar a sitios elevados, entre otros controles.

Lo cierto es que su manejo se siente muy simple y familiar, por lo que adaptarse a la jugabilidad es fácil y sencillo. Algo similar sucede con la construcción de estos primeros mundos, que lo revisten una gran complejidad para no abrumar al jugador, aunque sí que disponen de diversos secretos por descubrir de los que hablaré más adelante. Los enemigos tampoco suponen una gran amenaza, algo que espero que se explote en niveles más avanzados para aumentar la dificultad, aunque estamos ante un título familiar a grandes rasgos. Desde luego, sus primeros compases son realmente prometedores.
No obstante, una de las mejores noticias que me dejan estas impresiones iniciales es que cada uno de los niveles respira su propia esencia. En el primero de ellos, Astro Bot debe desplazarse por un entorno frondoso en el que hay que avanzar de manera vertical, mientras que en el segundo de ellos la acción se traslada a una ciudad cuyos niveles la componen edificios en construcción, vigas y grúas, entre otras cosas. El diseño de cada uno de estos niveles es único y muy original, por lo que espero que siga siendo así en el resto de la aventura para que siempre dé la sensación de estar jugando algo nuevo.
El objetivo principal de cada nivel es rescatar a los diferentes bots que hay repartidos por el mapa. Algunos serán más sencillos, otros requieren de una mayor habilidad, pero la gran sorpresa en este sentido es que algunos de ellos están relacionados con franquicias de PlayStation. Así, en esta primera toma de contacto, pude rescatar a versiones robóticas de Ratchet y Rivet, así como PaRappa y tener un encuentro muy especial con Kratos. Apunta a ser uno de los puntos fuertes del título, arrancando una sonrisa constante con cada aparición especial. Cabe recordar que Sony ha confirmado que serán alrededor de 150 cameos. Casi nada.
La magia de los power up

¿Y qué es lo que hace tan especial a cada uno de los niveles para que sea diferente al anterior? Pues que cada uno de ellos dispone de un power up único que transforma la experiencia. En los tres niveles centrales que pude probar -dos principales y una batalla contra jefe-, cada uno de ellos era diferente y se adaptaba a la perfección al diseño de los mismos, por lo que creaba una simbiosis perfecta para disfrutar al máximo del recorrido. Teniendo en cuenta que el juego final contará con más de 80 niveles, me resulta impensable que cada uno de ellos disponga de una mecánica propia, por lo que lo más seguro es que algunas se repitan, pero si hay una veintena de ellas ya me parecerá una absoluta locura.
En el primero de los niveles, al alcanzar un cofre situado a la mitad del mismo, Astro Bot consigue un pequeño pulpo que se adhiere a la parte trasera del protagonista para conformar una especie de globo con el que flotar en el aire y alcanzar lugares mucho más elevados o plataformas lejanas que esconden algunos secretos como créditos o piezas de puzle, cuya utilidad aún no queda clara. Es una mecánica muy original y que permite experimentar sensaciones diferentes a las de la primera mitad del nivel, además de ofrecer sensaciones de ingravidez en el DualSense, algo en lo que profundizaré más adelante.
En el segundo de los niveles, el de la ciudad en construcción, es un perro cohete el que se une a la aventura y he de decir que es una de las mecánicas que más me ha gustado. No solo porque aporta en todo momento en el transcurso de la jugabilidad, permitiendo atravesar estructuras por la potencia del cohete, sirviendo de impulso para alcanzar lugares más lejanos y combinando con saltos y otras de las posibilidades jugables, sino que además cuenta con su importancia en el combate. Probablemente la variedad de enemigos sea una de las notas pendientes de Astro Bot en estos primeros compases, pero en este nivel se incluye un tipo de ellos que solo se puede derrotar con este power up. De este modo, hay que esquivar sus acometidas hasta situarte a su espalda y lanzarlo fuera del escenario. Una gran demostración de cómo sacar el mejor partido posible a una mecánica.

Astro Bot destaca por un gran dinamismo y por todas las opciones que va ofreciendo en cada uno de los niveles, pero también apunta a ser puro espectáculo en las batallas contra jefes. Después de superar estos dos niveles iniciales, se me permitió combatir contra uno de los primeros jefes de la aventura: un pulpo gigante con ganas de gresca. Aquí también se incluye un power up exclusivo que permite a Astro Bot aumentar la longitud de sus puños, algo fundamental para poder enfrentar al jefe, pero también para desplazarse por el entorno, haciendo uso de los puños como lianas para alcanzar otras plataformas hasta alcanzar la isleta en la que se desarrolla el combate.
No voy a engañar a nadie: el combate contra el jefe me pareció sencillo y poco elaborado. Se nota que forma parte de los primeros compases, porque su patrón de movimientos es muy predecible y fácil de esquivar, por lo que todo se limita a esperar al momento opotuno para poder golpear sus tentáculos primero y después sus ojos antes de mandarlo a la estratosfera gracias a la mecánica adquirida en este nivel. Espero que los próximos jefes supongan un reto mayor, ya que la construcción de los mismos puede ser determinante para aportar momentos épicos a la aventura. Desde luego, tiene potencial para conseguirlo.
Secretos por descubrir para los más completistas

Una de las grandes virtudes de los referentes en el género de plataformas es su capacidad para ofrecer secretos constantes que inviten a regresar a los niveles y conseguir objetos y otros coleccionables que no estuvieran disponibles a simple vista en la visita inicial. Teniendo en cuenta que lo que he podido jugar formaba parte de, probablemente, la primera galaxia del juego, no se puede decir que los bots y las piezas de puzle estuvieran demasiados escondidas, pero sí que hya pinceladas que apuntan a que en niveles futuros pueden contar con rompecabezas más elaborados para su obtención.
En estos dos niveles principales se puede acceder a lugares secretos que requieren de un puzle especial para conseguir el objetivo, bien sea un bot o una pieza de puzle. Uno de ellos me llamó especialmente la atención, ya que se trataba de una pequeña sala en la que había que pintar una pared para poder descubrir las plataformas que te hacen avanzar hasta alcanzar el nivel superior donde reposaba uno de los bots especiales de PlayStation. Resultaba una mecánica simple y de rápida resolución, pero es un indicio de que situacionesa similares pueden dar mucho juego en niveles más complejos, lo que me genera una gran curiosidad en este sentido.
Hay otro detalle que pude descubrir al rejugar uno de los niveles. Y es que en la segunda pasada a cada uno de ellos se puede ver una casa de pájaro al inicio del mismo que cuesta un número determinado de créditos. Si lo desbloqueas, un pájaro robótico acompaña a Astro en todo momento para indicar con una señal luminosa si te encuentras cerca de un coleccionable que hubieras pasado por alto. Un detalle muy interesante que los completistas agradecerán para no dejar atrás ningún tipo de objeto o secreto e izar la bandera dorada en cada uno de los niveles, sinónimo de que has completado todo lo posible en el mismo.
Y un reto para los más exigentes

Hasta ahora he dejado claro que estos niveles de Astro Bot son ligeramente simples y con un enfoque familiar. Por lo tanto, ¿hay lugar para los plataformeros más exigentes en la nueva apuesta de PlayStation por el género? La respuesta es un rotundo sí. Una vez se superan ciertos niveles, se liberan otros con una dificultad y construcción mucho más compleja. Aquí no hay power ups que valgas, pues has de superarlos con lo mínimo y con una precisión quirúrjica para alzarte vencedor. Pude probar dos de ellos y lo cierto es que me hicieron sudar la gota gorda.
Para poder superar ambos tuve que morir varias veces para descubrir qué tenían que ofrecer. Si has jugado a Super Mario Wonder, se acercan mucho a los niveles secretos de cada mundo o, si quieres un ejemplo más cercano a la plataforma que nos ocupa, con Sackboy: Una aventura a lo grande, también se viven situaciones similares en sus niveles más exigentes. En este sentido, Astro Bot ofrece una experiencia breve, pero muy intensa. Has de avanzar por los diferentes mapas con peligros constantes. O el suelo se viene abajo a tus pies, o hay un enemigo que te bloquea un pasillo mínimo por el que avanzar o hay saltos arriesgados y milimétricos solo aptos para los más pacientes.
A pesar de todo el sufrimiento que conlleva superar estos niveles, he de admitir que son de los que más me han hecho disfrutar en esta primera toma de contacto con Astro Bot. Se nota que Team Asobi quiere dirigirse a todo tipo de públicos y en este sentido van hacia el más exigente en los experimentados al género de plataformas. Si estos son los de la primera galaxia y, a priori, los más accesibles, no quiero pararme a pensar en la locura que habrán preparado para los niveles más avanzados. Mis pulgares ya están listos para sufrir cuando llegue el momento de probar el título al completo. Eso sí, he echado en falta algún tipo de penalización por morir, ya que no hay un contador de vida ni ninguna pérdida por fallar, lo que puede ser un obstáculo para los más exigentes.
El DualSense vuelve a brillar

Si Astro Bot ya luce increíble con todo lo contado hasta el momento, también se luce en uno de los aspectos que ha pasado más desapercibido hasta la fecha en PS5 desde el lanzamiento de la consola: la retroalimentación háptica del DualSense. Es cierto que se han visto algunas pinceladas en otros títulos y que el uso de los gatillos adaptativos sí que ha estado más extendido, pero durante cuatro largos años se ha suspirado por una experiencia similar a la que ofrecía Astro's Playroom y que enamoró a todos los poseedores de la consola de actual generación. ¿Y quiénes mejor que sus principales valedores para repetir la jugada?
Team Asobi vuelve a demostrar que tiene el cetro para conseguir extraer el máximo potencial de las virtudes del DualSense. Si bien es cierto que las sensaciones no son tan profundas como con Astro's Playroom, sí que aporta algo mucho mayor que lo que se ha podido experimentar en todo este tiempo en otras propuestas. Probablemente porque se destinan recursos a otras virtudes técnicas, pero lo cierto es que hasta la fecha ha sido una de las opciones más desaprovechadas de la consola que, por fin, vuelve a brillar como merece.
En este puñado de niveles que he podido jugar de Astro Bot ya he sentido ese deslizamiento tan particular del mando al pisar hielo o esa sensación de chapoteo al estar sobre el agua. Experiencias únicas que se echaban de menos y que cuentan con un enorme potencial de cara al resultado final del juego. Además, el uso de los power up también suma en este terreno, con la sensación más liviana del mando al hacer uso del globo o el choque que genera la potencia del cohete al romper cristales o estrellarse con cualquier superficie. Estoy deseando saber cómo se implementa en futuros niveles.

Sin embargo, he de advertir que no cabe esperar que Astro Bot suponga una experiencia tan intensa como la de la demo técnica de PS5. Al ser un juego mucho más profundo y elaborado, se han destinado otro tipo de recursos a la construcción de niveles, su diseño artístico, las mecánicas y otro tipo de aspectos que definen al título de PS5. Lo que quiero decir con esto es que la retroalimentación háptica no está presente en todo momento, sino que cuenta con momentos puntuales que sí consiguen extraer su máximo potencial, lo que ya es muy superior a lo vivido en la gran mayoría de juegos exclusivos lanzados hasta el momento.
Bonito a nivel visual y una roca en lo técnico

Toca finalizar estas primeras impresiones de Astro Bot hablando del aspecto visual que luce el título, que saca a relucir todas las grandes virtudes de PS5. Es un juego realmente bonito, muy colorido y con un diseño de niveles fantástico que va evolucionando constantemente desde el punto inicial al final. A nivel de texturas cuenta con una gran definición y no se aprecia ningún tipo de experiencia irregular en lo visual, por lo que a algo más de dos meses de su lanzamiento en la consola de Sony, luce realmente fantástico.
En lo técnico, ningún tipo de problema reseñable, ya que la jugabilidad se mantiene fluida en todo momento y se mueve a unos fantásticos 60fps que permite que el avance sea mucho más ligero y satisfactorio. Tanto a nivel visual como sonoro el juego es un absoluto deleite, por lo que tocará esperar para saber cómo se desarrolla en el resultado final, pero apunta a ser uno de los grandes protagonistas del catálogo de esta segunda mitad de 2024 en PS5. Por el momento no se pueden sacar grandes conclusiones porque apenas he podido ver un pequeño porcentaje de lo que terminará siendo el juego completo, pero las sensaciones han sido tremendamente positivas.
Astro Bot va lanzado al estrellato en PS5

El próximo 6 de septiembre será un día muy importante para todos los poseedores de una PS5. Astro Bot apunta a ser uno de esos videojuegos llamados a ser importantes en el catálogo de toda una generación. Su construcción, la relevancia que va ganando el personaje y la importancia que tiene para conseguir extraer todo el potencial de algunas de las grandes virtudes de la consola de actual generación son algunas de sus grandes bazas para triunfar y ganarse un lugar privilegiado en el presente y en el futuro de la marca.
Con más de 870 niveles y 150 cameos de otras franquicias de la compañía japonesa, Astro Bot tiene todos los ingredientes necesarios para triunfar y comenzar a construir un camino que le lleve a ser la mascota moderna de PlayStation, algo que dependerá del desempeño de esta nueva entrega. En un año en el que el catálogo de Nintendo Switch no parece aportar grandes propuestas, el reinado del género de plataformas puede recaer sobre sus vecinos japoneses. Lo que he probado hasta el momento de Astro Bot luce realmente bien y si esto es solo el inicio de la aventura, le auguro un tremendo futuro como uno de los referentes destinados a competir contra un gigante como Mario. En poco más de dos meses saldremos de dudas por si puede conseguirlo.