Primeras impresiones de Atlas Fallen - Entre combates y dunas

El estudio Deck13 ya puede ser considerado como unos veteranos, siendo especialmente importantes, en los últimos años, si hablamos de videojuegos tipo "souls" no desarrollados por FromSoftware. Puede que muchos ya os hayáis olvidado de ellos, pero estamos hablando de las personas que nos trajeron la franquicia "The Surge", y anteriormente nos proporcionaron "Lord of the Fallen", un juego bastante divisivo entre los usuarios. Si, estos no son los únicos videojuegos que han desarrollado, pero son los más reconocidos que hemos recibido por su parte, y por tanto es normal que se les conozca por ellos.

Hace no mucho anunciaron Atlas Fallen, un videojuego que consiguió ganarnos desde el principio gracias a su estética, y que parecía ser una experiencia nueva dentro del estudio, destacando especialmente el movimiento, que a diferencia de en sus anteriores trabajos, aquí parecía que tendríamos una movilidad rápida y frenética.

Nosotros ya hemos podido probar sus inicios, y hemos completado todo lo que hemos podido, por lo que a continuación os vamos a contar qué podéis esperar encontraros en Atlas Fallen, aunque ya os podemos adelantar que nos ha sorprendido.

Os lo advertimos, no es un soul

Sí, los anteriores trabajos del estudio eran todos del llamado género soul, y por tanto, al igual que muchas personas, nosotros creíamos que iría en esa línea, pero nuestra sorpresa vino cuando empezamos a jugar. Francamente os podemos decir que no hay ni rastro del conjunto de mecánicas que suele implementar FromSoftware en sus títulos, algo que nos ha sorprendido, y a la vez nos ha gustado bastante.

En su lugar, Atlas Fallen apuesta por un título cuyo combate recuerda a un "hack and slash", pero con un sistema de progresión de RPG clásico. Por desgracia, en el tiempo que hemos jugado, no podemos llegar a discernir si estos sistemas evolucionan de la manera que deberían, pero sí podemos decir que en sus bases están muy bien construidos, y lo más importante, resultan divertidos y no tediosos.

Además, también hemos podido notar que el parry será muy importante dentro del juego, además de muy fácil de ejecutar y muy satisfactorio. Básicamente, al pulsar el botón de guardia en el momento justo el enemigo quedará petrificado, pero por supuesto no podemos abusar de ello, dado que dependeremos de una barra que irá llenando. Aún así, ha resultado ser una mecánica que nos ha gustado bastante, y que convierte el combate en uno muy espectacular.

Atlas Fallen se aleja bastante del género soul.

La movilidad es muy importante aquí

Esto ya lo pudimos notar en los tráilers del juego, pero cuando nos hemos puesto a los mandos nos ha sorprendido bastante lo bien pensado que está, aunque no podemos decir que a los mandos se haya sentido tan espectacular como en todo lo visto anteriormente.

Básicamente, el guante mágico que tenemos nos permitirá, además de combatir, deslizarnos por la arena, esto lleva a que por ciertas superficies corramos de manera normal, lo cual no nos ha terminado de convencer, dado que acaba siendo un impedimento, y un tanto molesto. Aún así, como nota muy positivo, y aunque no podemos hablar del conjunto final, Atlas Fallen parece ser un juego que cuida mucho su sistema de movimiento. Solo durante esta prueba, que nos ha permitido jugar una zona relativamente pequeña, aunque con diversas misiones, hemos podido desbloquear diferentes habilidades que ayudan a la exploración, como puede ser el salto doble o el impulso en el aire.

Puede parecer marketing, pero sí que pudimos probar una zona que era, básicamente, un desierto, y por tanto la movilidad estaba en su expresión máxima, lo que nos permitió ver cómo se comportaba, y no podemos poner ninguna queja. De nuevo, no sabemos si después sigue evolucionando, o si se termina haciendo repetitivo después de cierto número de horas, pero debemos decir que hemos quedado muy satisfechos con lo probado.

Si hay algo que hemos podido sacar en claro es que el movimiento será muy importante.

Un mundo destruido

En este aspecto vamos a hablar poco, y es que de la historia es difícil enterarse mucho en esta clase de pruebas, pero sí hemos podido notar que tendrá cierta importancia el mundo que tenemos alrededor. No sabemos por qué, ni lo revelaríamos aunque lo supiéramos, pero lo que recorreremos será, algo así, como los restos de un mundo que ya no prevalece.

La destrucción de este mundo, y su decadencia será el punto de partida de todo, desde la construcción del propio escenario, hasta las misiones que deberemos completar, pasando también por la historia principal. Todo rezuma un contexto postapocalíptico, el cual parece que tendremos que desgranar, siendo esta una premisa que hemos visto varias veces, lo que no hace que deje de ser muy interesante.

El mundo de Atlas Fallen nos ha mostrado la belleza en la devastación.

Misiones por doquier

Ya hemos mencionado que las misiones se alinearán con el mundo que recorremos, pero ahora nos toca hablar de la estructura de estas. De primeras, lo primero que podemos decir es que, en ciertas cosas, estas nos recuerdan a las típicas misiones que podemos encontrar en títulos de mundo abierto, lo que resulta curioso teniendo en cuenta que este título no pertenece a ese género.

Concretamente, y según hemos podido saber, en Atlas Fallen podremos ver varios mini mundos abiertos en los que movernos, y nosotros hemos podido explorar libremente uno de ellos. En este, nos hemos podido encontrar básicamente dos tipos de misiones, principales, que hicieron avanzar la historia, hasta el punto en que nos enfrentamos a un jefe muy curioso, y otras secundarias.

La verdad es que no podemos atrevernos a hablar sobre cómo se llevará en el juego final, pero aquí no podemos decir que el mapa estuviera muy saturado de objetivos secundarios. Eso sí, de lo que sí hemos podido ver muchos es de combates, y es que estos son aleatorios, es decir, que cada cierto tiempo aparecen enemigos de la nada para enfrentarte, al estilo de los JRPG clásicos.

El sistema de misiones será muy reminiscente de los juegos de mundo abierto, o al menos eso parece.

Las dunas que nos enamoraron

De nuevo, no podemos aventurarnos a decir si el juego final merecerá la pena, pero tras esta prueba hemos terminado mucho más confiados con este título. No podemos decir si el título se desarrollara como debería, pero las bases están ahí, y salvo algún problema que hemos encontrado, estas son muy buenas.

Ahora solo nos queda hasta el mes de mayo para recibirlo de manera oficial, y comprobar si estas impresiones se confirman, pero estamos hablando, sin lugar a dudas, uno de los lanzamientos más importante de este año 2023.