Primeras impresiones de Dragon Quest Treasures - El buscatesoros con más encanto

Cuando pensamos en Dragon Quest nos viene a la cabeza una aventura RPG fantástica con exploración, combate y un sentido del humor único. El nuevo juego de la saga podría considerarse un hermano pequeño, un spin-off que no tiene mayor ambición que contar una historia. Dragon Quest Treasures no sólo es una aventura de buscatesoros, pero en la primera hora de juego no hemos podido ver ese nivel de profundidad que tienen otros juegos. Hoy te contamos nuestra experiencia con este título de Square Enix que sale el 9 de diciembre en Nintendo Switch.

En realidad hemos podido jugar durante 40 minutos en la Square Enix Plays 2022 celebrada en Londres. Un escaparate más modesto que la Tokyo Game Show de todo lo que tiene que llegar de la compañía. Uno de esos lanzamientos es Dragon Quest Treasures que ofrece una experiencia tranquila y pausada para los fans de la consola portátil. Es el juego que todo el mundo busca para pasar un rato agradable porque no siempre tenemos 3 horas para jugar videojuegos.

En busca del tesoro perdido

Limo se une a los protagonistas de Dragon Quest Treasures

Y como tal, se trata de un juego con más puzles y exploración como deja caer el nombre del juego. La historia presenta a un par de hermanos, Erik y Mia, que se encuentran en un barco vikingo. En la habitación de al lado, los tripulantes de esta embarcación celebran por los tesoros encontrados, pero los hermanos quieren vivir su propia aventura. Se reúnen en la cubierta, donde nos enseñan las primeras mecánicas, algo sencillito. Agacharse para pasar por algunos lugares estrechos o utilizar el tirachinas son nuestros primeros pasos.

Esto último será fundamental para los combates, pero no nos desviemos. Erik utiliza su tirachinas para abrir una jaula del barco y liberar un par de criaturas curiosas: un cerdo volador y una gato volador, aunque después descubrimos que es una gata. Esto no gusta a los vikingos y ambos hermanos se lanzan con un bote al mar abierto para escapar. Ahí empieza realmente su aventura. En la primera isla, Mia y Erik entran en una mazmorra para encontrar su primer tesoro: dos dagas mágicas. Antes hay que resolver un puzle nada complicado, pero que anticipa qué podemos encontrar más adelante: interruptores, atajos o palancas son una opción.

Las dagas tienen un poder especial que no desvelaremos, además de ser dar un giro interesante a la trama. Esta vez controlando a Mia, la niña se hace amiga de la criatura más emblemática de Dragon Quest. Efectivamente, hablamos de un limo de color rosa esta vez que tiene el poder de visionar tesoros escondidos. La mecánica consiste en visualizar una imagen, donde se encuentra la 'X' del tesoro, así que Mia sólo tiene que encontrar el lugar exacto y cavar con la daga.

El combate simplificado

No podemos hablar en profundidad del combate. La primera toma de contacto ha sido realmente breve. Mia puede atacar con la daga cuerpo a cuerpo, pero no parecía una buena idea. Finalmente limo le ayudó a deshacerse de un enemigo volador, mientras Mia utilizaba su tirachinas contra el objetivo. A partir de ese momento, limo nos acompaña todo el viaje y parece que no será el único como ocurre con otros juegos de la saga.

El combate en tiempo real está bastante simplificado

Lo que es evidente es que el juego tendrá un combate simplificado y un sistema de progresión por niveles para mejorar los atributos base. En cualquier caso, es un juego RPG que siempre despierta nuestra curiosidad y simpatía por el diseño de personajes. Es cierto que a nivel técnico es más flojo que sus hermanos mayores, pero aún quedan más de 2 meses y medio para ver el resultado final.