Dark Souls: Repasamos su historia ante el inminente lanzamiento de la tercera entrega

Dark Souls: Repasamos su historia ante el inminente lanzamiento de la tercera entrega

Cuando hablamos de Dark Souls, lo primero que se nos viene a la cabeza es la muerte. Bueno, mejor dicho, el número de veces que hay que morir para poder superar todos sus retos la primera vez. From Software es una experta desarrolladora en cuanto a este ámbito de género y videojuegos. Con un total de 2 juegos de la saga a la venta actualmente, y con unos hermanos “gemelos”, hoy vamos a hacer un repaso de la saga Souls para ir abriendo boca ante el inminente lanzamiento de la tercera entrega numerada de la serie: Dark Souls 3.

Saga Dark Souls: Repasemos sus historias antes de que se lance Dark Souls 3

Tras un prólogo en el que deidades y dragones destrozaban y armaban el mundo a su voluntad mediante el uso de almas de poderoso poder, despertábamos en el Refugio de los No Muertos, presos de una maldición, que ha caído en el mundo y a toda la humanidad que sucumbe a la muerte, como así en una celda de dudosa higiene. Un caballero desconocido nos arroja un cadáver y descubrimos en él la llave para salir de nuestra prisión y emprender el viaje que estamos destinados a recorrer, ya que somos el No Muerto Elegido de la profecía.

De esta forma, y después de haber derrotado a nuestro primer jefe (que si eres primerizo, te costará y matará varias veces), somos introducidos en Lordran, el territorio donde se disputaron todas las batallas del prólogo. Allí seremos informados de qué hacer en nuestros primeros pasos, pero esta será toda la ayuda que el juego nos proporcionará. Con unos cuantos de caminos posibles desde el Enlace de Fuego, y aún escogiendo el correcto, ya tendremos que hacer frente a lo que todo el mundo odia y ama de la saga Souls: la dificultad de los enemigos.

Saga Dark Souls: Repasemos sus historias antes de que se lance Dark Souls 3

En Dark Souls, nuestra misión será enlazar el fuego nuevamente, tal como lo hiciese Gwyn, el Señor de la Ceniza, o no hacerlo, lo que conllevaría al final alternativo en el que el tiempo de los dioses se acaba y en el que el Alma Oscura gobierna a su voluntad. Durante nuestro periplo conoceremos a grandes personajes como el Caballero Solaire, el supuesto y no canónico (aunque el juego te lo deja caer) hijo del Señor Gwyn, quien no dudará en echarnos una mano si somos humanos contra algunos jefes, Siegmeyer de Catarina, el famoso Caballero Cebolla, o Artorias (si disponemos del DLC que lo contiene), aunque este último será un enemigo del que descubriremos su verdadera naturaleza con los objetos relacionados que encontremos. Además, nos toparemos con su incansable compañero de fatigas, el Gran Lobo Sif, que guarda su tumba de maleantes o de quienes intentan hacerse con el anillo que éste posee, aunque le hayamos salvado en el pasado…

Como todo juego de este estilo, la información se nos será otorgada a cuentagotas. Pocas cosas podremos obtener de los diálogos de los NPCs amigables que nos aclaren algo, por lo que tendremos que recurrir a leer las descripciones que tienen todos y cada uno de los objetos. Y lo cierto es que, leyendo esto mismo, nos damos cuenta de que la historia de Dark Souls es muy triste incluso desde el principio. Destacaríamos la historia de Artorias, que es sin duda una de las más tristes, y que se ve aderezada con la de su compañero, el Lobo Sif. Estamos ante dos enemigos que en ningún caso queremos abatir, pero que será necesario para poder seguir avanzando. Algo parecido pasará con Gwyn, aunque llegados a ese punto, queremos que caiga, incluso si nos ponen una canción triste. Y es que reparte tortas que da gusto.

Pero si algo hay que destacar aparte de la historia y de sus personajes, es sin duda a los jefes puñeteros, esos que nos hacen tirar el mando por la ventana y emitir improperios a diestro y siniestro. Y como no, Ornstein, el Matadragones, y Smough, el Verdugo, tenían que ser los dos seres más odiados que ostentan este cargo. La pelea contra ellos es algo así como un festival de muertes que se producen al final de la mortal senda que antes has tenido que recorrer para llegar a ellos en Anor Londo. Estos jefes son los culpables de que muchos hayan abandonado el juego a su suerte. Ahora bien, cuando los superas por primera vez, ya sabes que los siguientes retos serán coser y cantar… “¡HAS MUERTO!”.

Saga Dark Souls: Repasemos sus historias antes de que se lance Dark Souls 3

Llegados a Dark Souls 2, lo primero con lo que nos topamos es que no se sabe nada de lo ocurrido en la historia anterior. Esto te debe a que la ambientación temporal y geográfica de ambos títulos es completamente diferente, y en alguna conversación se da alguna pincelada a lo ya visto para hacerlo más coherente. Asumiendo de nuevo a un personaje anónimo que basará sus fuerzas en lo que hayamos elegido en un principio, tendremos por delante toda otra historia llena de peligros donde habrá algunos cambios en cuanto a la forma de juego planteada, pero salvaguardadles.

En nuestra nueva historia, tendremos que recorrer Drangleic, el hogar de las almas poderosas. En este emplazamiento deberemos buscar al Heraldo de Esmeralda, la chica que nos ayudará en toda la historia a reforzar nuestras cosas como así subir nivel y volver a ser humanos. Esta nos informará de que tenemos que derrotar a cuatro seres de increíble poder y con poderosas almas: el demoníaco Viejo Rey de Hierro, la repulsiva abominación El Podrido, la abandonada Pecadora Perdida, y el gigante arácnido Amada Freja del Duque. Esta será nuestra iniciación en el juego. Acto seguido conoceremos a la malvada Nashandra, que pasará desapercibida hasta bien avanzada la trama. Esta guarda una enorme y reveladora conexión con un “personaje” del título anterior.

Saga Dark Souls: Repasemos sus historias antes de que se lance Dark Souls 3

Nuestra prioridad será librar batalla contra los gigantes, pero en cierto punto, después de unos cuantos jefes, seremos informados de lo que había pasado en el pasado y de lo que tenemos que hacer. Con el Rey Vendrick convertido en Hueco, podremos conocer a Aldia, la creadora del Dragón Antiguo. Ésta nos indicará que tendremos que hacer frente al Señor de los Gigantes y, al hacerlo, ganaremos afinidad con ellos y la misión de acceder al Trono del querer, que se encuentra bajo el castillo de Drangleic.

Así, con esta misión, nos encaminamos contra Nashandra, la hermosa jefe final del juego, que se interpondrá en nuestro camino para abrir las puertas del trono. Al derrotarla, seremos el nuevo monarca, o no (si contamos con los pertinentes DLC). Ahora bien, la conexión de Nashandra con Dark Souls no es otra sino que es un fragmento del malvado Manus, Padre del Abismo, el enemigo final del DLC Artorias of the Abyss y responsable de que Artorias sucumbiese al poder del Abismo.

De esta forma, las dos historias quedan unidas dando a entender que el No Muerto elegido de Dark Souls finalmente optó por enlazar el fuego de la Primera Llama. Al parecer, al quedar enlazada nuevamente la Primera Llama, el poder del Abismo no puede seguir avanzando durante un tiempo considerable, por lo que habría estado aletargado hasta encontrar la posibilidad perfecta de salir, como hizo en la forma de Nashandra.

Saga Dark Souls: Repasemos sus historias antes de que se lance Dark Souls 3

Pero claro, con Dark Souls 3 a la vuelta de la esquina, ¿qué podríamos ver? Si ponemos atención a lo que sabemos, éste será una precuela directa del primero, por lo que sería posible ver el inicio de la historia del Señor Gwyn como Señor de la Luz Solar y los acontecimientos que desencadenarían a la profecía del No Muerto Elegido. Aunque también podría darse el caso de que se ahondase más en la historia de Manus, Padre del Abismo, y en cómo llega a derrotar al bueno de Artorias.

Todo lo que nos queda es esperar hasta el próximo 12 de abril para poder salir de dudas y comprobar si estamos ante un juego que supera las expectativas que se tienen desde el primer Dark Souls, que no son pocas. ¿Tú qué esperas ver en esta nueva aventura de From Software? Háznoslo saber.

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