Este thriller político moderno tiene algunos paralelismos con La Casa del Dragón que te enganchará

En más de una ocasión hemos visto como personas malvadas resultan ser gobernantes de un lugar que les ofrece un poder incalculable, y en esta ocasión, se ha extrapolado a la realidad y vemos a Gene Hackman ejercer como el presidente de los Estados Unidos. Sin embargo, en este thriller político el mayor peligro no es el hombre que ejerce el poder, sino la larga sombra que proyecta y la forma en la que los subordinados se ofrecen como voluntarios para hacer cosas horribles en su nombre.

Así pues, nos damos cuenta como tiene cierta similitud con Juego de Tronos, dejando un sabor de La Casa del Dragón, una de las mejores series de Max, con paralelismos que con cada minuto se vuelven más estrechos.

¿De qué trata Poder Absoluto?

Un robo como casi cualquier otro termina en un gran problema

Cuando un experto ladrón que conocemos intenta dar un gran golpe e ingresa a una mansión que cree que está vacía, hace un descubrimiento que cambia el objetivo de su “misión”. La bóveda, que sabe que está llena de un botín, en realidad tiene un espejo unidireccional a través del cual puede espiar secretamente y de forma muy perversa el dormitorio.

Es en este momento cuando el presidente Alan Richmond entra en con una mujer mucho más joven, a lo que el ladrón, Luther Whitney, se queda observando con su ceño fruncido.

En un momento, Richmond se pone bastante violento, a lo que la mujer responde defendiéndose. Sin embargo, el presidente pide ayuda y de inmediato dos hombres irrumpen y acaban con la vida de la mujer con varios tiros.

Ahora, bajo la dirección de la infame jefa de gabinete del presidente, los agentes del Servicio Secreto asignados empiezan a limpiar el desastre del presidente, y el plan es culpar a un ladrón como el causante del vil acto. Por lo que Luther intenta huir antes de meterse en más problemas, pero pronto es incriminado por el crimen y se encuentra prófugo.

Cuando el honesto detective Seth Frank es puesto a cargo de la investigación del homicidio, casi al instante se da cuenta de que pocos ladrones podrían tener la habilidad para entrar en esa mansión, y Luther es el único que vive en Washington DC.

Y después de haber charlado con Frank, Luther planea huir del país. Pero en el bar del aeropuerto ve al presidente Richmond dar un discurso televisado junto a Walter Sullivan, el esposo de la mujer asesinada, quien era su amigo y aliado cercano. Ante tal muestra de falsedad, Luther cambia de opinión y decide quedarse y acabar con la cerrera del presidente.

Esto da inicio a un juego del gato y el ratón entre Luther, Frank y la administración corrupta que planea meterse con la familia de Luther. Ahora, este último debe mantener a su familia a salvo de los agentes corruptos del Servicio Secreto y al mismo tiempo, derribar al hombre más poderoso del mundo.

Poder absoluto se parece mucho a La Casa del Dragón

Los paralelismos con La Casa del Dragón son increíblemente cercanos

Walter Sullivan, un hombre bueno y decente que gracias a su fortuna tiene el poder de un mismísimo rey, y cuyo único defecto es haberse casado con una mujer mucho más joven después de la muerte de su amada esposa… Viserys Targaryen, evidentemente.

Además de ello, el presidente Richmond es un villano relativamente pasivo, que no intenta hacer daño al público, de hecho, prefiere ser agradable. Aunque, dejando de lado su violencia sexual, el daño que provoca es realmente por medio de sus subordinados, que se encargan de hacer un gran mal en su nombre. Lo que nos lleva a pensar en que se trata del Rey Aegon II, aunque el presidente no llega a realizar actos tan depravados como los de este rey.

Y por si fuese poco, tenemos a Judy Davis, quien es un agente que trabaja detrás de escena y hace el trabajo sucio mientras mantiene las manos limpias de sus jefes. Es decir, hablamos del equivalente de Lord Larys Strong.

Sin duda, cualquiera podría pensar que La Casa del Dragón ha tomado inspiración de esta película. Pero, sea como sea, tanto el largometraje como la serie televisiva son dos producciones que sin duda vale la pena ver.