Ridley Scott reconoció que Harrison Ford fue "el mayor dolor de cabeza" de Blade Runner: esta es la razón

Blade Runner es aclamada como uno de los mejores clásicos de ciencia ficción del cine. Lo cierto es que esta película fue la precursora que dio inicio a esa temática ciberpunk como una de las más influyentes de su época, la cual sigue inspirando nuevas obras. Lo que quizás no sepas es que Ridley Scott y Harrison Ford no se llevaron muy bien durante la producción. De hecho, el cineasta admitió abiertamente que el actor era "el mayor dolor de cabeza" con el que había trabajado en toda su carrera.

El legado de Blade Runner en el cine

La pregunta es obvia. ¿Cuál fue la causa de este enfrentamiento? Fue en una entrevista de 2006 donde el director reconoció cuál fue su mayor problema con Blade Runner. Cuando trabajaron juntos en esta película, Harrison Ford ya era un nombre reconocido, sobre todo porque había participado en franquicias como Star Wars o Indiana Jones.

El principal problema vino porque el actor sabía mucho sobre el proceso cinematográfico, lo que provocó que él y Ridley Scott chocaran más de la cuenta. "Sabe mucho, ese es el problema. Cuando trabajamos juntos, era mi primera película y yo era el nuevo en el grupo. Pero hicimos una buena película", comentó el cineasta.

La revelación no deja de ser sorprendente, considerando que en 2006 ya había trabajado con Russell Crowe en Gladiator. Sin embargo, Ridley Scott también confesó que mantenía una buena relación con Harrison Ford después de todo este tiempo. La realidad es que los problemas de producción de Blade Runner están bien fundados. De hecho, en el estreno original en cines, Harrison Ford hizo una narración en off que fue bastante controvertida.

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Fue rápidamente eliminada de la versión oficial del director, estrenada por primera vez en 1992. Un desacuerdo diferente que también fue importante sobre Blade Runner se refiere a la identidad de Rick Deckard. Es decir, si era un replicante o no. Aun manteniendo cierta ambigüedad, Ridley Scott se postulaba por la idea de que Rick Deckard era un replicante. De hecho, la estructura de la película también da ciertas pistas que sugieren esta revelación. Pero claro, nunca llegó a confirmarse del todo.

En cambio, Harrison Ford siempre prefirió mantener un hermetismo total con respecto al personaje, creyendo que era posible que Rick Deckard aún fuera un ser humano. También hubo un pequeño enfrentamiento con Ridley Scott por este asunto en el set. Asimismo, el director de Blade Runner 2049, Denis Villeneuve, reveló que ambos continuaron su debate sobre la identidad de Rick Deckard mientras trabajaban en la aclamada secuela tiempo después. Al final, el actor cedió y reconoció que podía estar de acuerdo con el director.

A pesar de sus problemas mientras trabajaban en la obra original, Ridley Scott y Harrison Ford siempre fueron conscientes del enorme impacto que tuvieron juntos en el largometraje que se estrenó en 1982. Después de todo, fue el inicio de un subgénero completamente nuevo en la ciencia ficción que se ha convertido en historia del cine.