Dragon Ball: Goku consiguió salvar su vida gracias a su técnica más rara y absurda
En uno de los episodios de Dragon Ball GT, Goku demostró disponer de una técnica de contención que consiguió salvarle la vida, algo que no le puede aportar ni el mismísimo Ultra Instinto.
Dragon Ball se prepara para ofrecer grandes dosis de contenido a través del estreno de Dragon Ball Daima el próximo año 2024, mientras que Dragon Ball Super sigue su curso en el manga con nuevas sagas y sucesos para los protagonistas más queridos de la franquicia manganime creada por Akira Toriyama. Por supuesto, Goku continúa demostrando ser el guerrero con más potencial de todos, aunque en muchas ocasiones se le siguen otorgando habilidades y nuevo poderes sin conocer del todo su procedencia. No obstante, esto ya ocurría en sagas anteriores.
Y, especialmente, en Dragon Ball GT. Si bien es una saga que con el tiempo se ha ido ganando el favor de los seguidores, los primeros compases no fueron nada sencillos, pues se producían situaciones realmente absurdas y el planteamiento no estaba a la altura de todo lo que había supuesto el éxito de Dragon Ball Z. Uno de estos acontecimientos incluso consiguió salvar la vida de Goku de una muerte casi segura, demostrando una habilidad de lo más extraña y que no está al alcance de ningún tipo de transformación.
La capacidad de Goku para reprimir sus lágrimas consiguió salvarle la vida
Tal y como recuerdan los compañeros de Screen Rant, durante el episodio 30 de Dragon Ball GT, Goku se ve inmerso en el tablero a tamaño real de Sugoro, una entidad de otro mundo que debe ganar diez mil partidas de ese juego para conseguir escapar de su castigo. En el caso de Goku, perder significaba la muerte, por lo que el guerrero saiyan se jugaba mucho más de lo que pudiera parecer. Haciendo uso de sus trucos y trampas, Sugoro propone un juego en el que los participantes no deben llorar, algo para lo que invoca unas cuantas cebollas frente a Goku y las corta, provocando que las lágrimas comiencen a invadir su rostro.
Sin embargo, sin saber muy bien cómo, Goku consigue reprimirlas y no solo eso, sino que las succiona para que vuelvan a su lacrimal y desaparezcan por completo. Una técnica del todo extraña y de lo más absurda que consiguió salvarle la vida de una muerte segura, algo que no pueden decir algunas de las transformaciones más poderosas que ha ido explorando en Dragon Ball Super. Hasta la fecha, esta "habilidad" no tiene explicación, demostrando que los inicios de Dragon Ball GT fueron realmente duros en cuanto a su planteamiento y contenido.