La nueva forma de Venom reafirma la mayor debilidad de los simbiontes en Marvel

Los seguidores más acérrimos a los cómics de La Casa de las Ideas serán conscientes de que una las mayores amenazas de Marvel son los simbiontes, sobre todo si se tiene en cuenta todo lo que se ha revelado hasta ahora tras la llegada de Knull. Pero incluso los habitantes de Klyntar tienen una kryptonita con la que poder hacerles frente. Cada simbionte tiene una debilidad clave, y eso parece que no va a cambiar tras los eventos de Venom War.

La reciente forma de Venom vuelve a confirmar la mayor vulnerabilidad de los simbiontes

Ahora, Marvel acaba de demostrar que, sin importar nada lo que pueda cambiar, existe una debilidad a la que ningún simbionte puede resistirse. Y la verdad es que no hay nada más que arda como el fuego.

La debilidad máxima de los simbiontes ha vuelto a confirmarse en el cómic Venom War: Deadpool #2. En este número, un aparente virus zombie que se ha desarrollado en Venom War muestra cómo muchos héroes familiares se han infectado hasta que el virus ha tomado el control y los ha convertido en auténticas amenazas temibles.

Una de los más preocupantes fue Man-Thing, un personaje dotado con la capacidad de quemar físicamente a cualquiera que sintiese miedo. Andi Benton, la anfitriona del simbionte Silence, logra usar sus poderes para intentar frenar al simbionte que posee a Man-Thing. No obstante, eso también requiere que ella misma lo toque, por lo que debe de enfrentarse a ese toque ardiente que no esperaba.

Esa capacidad siempre confiable de Anti-Venom para expulsar a un simbionte de su anfitrión falla, lo que demuestra que incluso Andi se llena de llamas tras tocar a Man-Thing. Por lo tanto, las cepas Anti-Venom del simbionte pueden ser efectivas contra la mayoría de oponentes, pero no hay nada como el fuego para expulsar a un simbionte del anfitrión al que está unido.

Desde siempre, los simbiontes han demostrado ser enemigos formidables que siempre han destacado por su letalidad. Los simbiontes pueden ser poderosos, pero siempre han sido vulnerables a dos cosas: el calor intenso y las frecuencias sónicas. De hecho, el calor del fuego y el sonido se relaciona directamente con Knull, quien es la principal fuente que explica el origen de estas debilidades inherentes a la raza procedente de Klyntar.

Por otro lado, Carnage ha sido el único simbionte que consiguió esquivar esas debilidades. El simbionte pudo evolucionar mucho más que la mayoría de los simbiontes, adquiriendo los poderes de otros héroes icónicos de Marvel para otorgarse la inmunidad que nunca nadie pensó que fuese posible. Inmune a los sonidos o al fuego, Carnage ha alcanzado un nivel de fuerza incomparable en el Venom-Verse.

El cómic Venom War: Deadpool #2 ya está disponible.