Las misiones más frustrantes que hemos padecido en los videojuegos

Las misiones más frustrantes que hemos padecido en los videojuegos

Los videojuegos con argumento suelen plantearnos desafíos y retos muy diversos. Cuando estos se enmarcan en mundos abiertos u ofrecen cierto grado de libertad, además, los desarrolladores optan por introducir misiones de diferentes tipos para que nos divirtamos durante las decenas de horas que nos durará el título. Sin embargo hay un tipo de misión que siempre ha sido odiado por todos: las misiones de escolta.

Estas tareas nos obligan no solo a defendernos a nosotros mismos de los peligros que nos acechan, sino que debemos encargarnos de que a nuestro acompañante no le pase nada. En ocasiones es un verdadero problema, pues la inteligencia artificial no está a la altura. Es por ello que hoy queremos acercarte algunas de las misiones más frustrantes que todos hemos tenido que sufrir y padecer jugando a videojuegos.

Emma Emmerich (Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty)

Recordamos con especial tirria esta fase de Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty por su peliaguda mecánica. Por si no teníamos suficiente con tener que meternos bajo el agua y recordar el camino de vuelta a la sección principal, debíamos cargar con Emma Emmerich, la medio hermana de Otacon. Recordar el camino, bucear con tiempo limitado y tener en cuenta la barra de respiración de Emma. Una auténtica tortura.

Ashley Graham (Resident Evil 4)

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La cuarta entrega numerada de la saga Resident Evil (la que cambió definitvamente el terror por la acción) era básicamente un juego de escoltar. En la piel de Leon S. Kennedy debíamos poner a salvar a Ashley Graham, la hija del presidente de los Estados Unidos. Sus chillidos al final acababan siendo lo de menos, pues la verdadera dificultad estaba en protegerla de los innumerables peligros que nos aguardaban.

Natalya (GoldenEye)

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Muchos coinciden en señalar a Natalya como la protagonista de la peor misión de escolta de todos los tiempos. GoldenEye es probablemente el shooter en primera persona más importante de la historia en consola, pero la fase de escoltar a Natalya siempre será recordada por su extrema torpeza y delicadeza. La inteligencia artificial aliada no era la mejor del mundo y Natalya podía perecer cuando menos lo esperáramos.

Cualquier superviviente (Dead Island)

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A lo largo de toda la aventura desarrollada por Techland deberemos escoltar a muchos supervivientes a diferentes lugares de la isla en la que se ambienta Dead Island. Estas misiones siempre son un problema, pero se vuelven todavía más peliagudas si nos encontramos en un entorno repleto de zombis y por un casual nuestros aliados disponen de una inteligencia artificial bastante limitada. Disponte a sufrir de lo lindo.

Yorda (ICO)

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El que probablemente sea el juego más infravalorado (y el mejor, de hecho) del Team ICO es el que da nombre al estudio. Nuestro protagonista, Ico, debe guiar a Yorda en todo momento mientras escapan de la fortaleza en la que están encerrados. Las mecánicas de juego son atractivas y empatizamos con el personaje, pero en ocasiones resulta muy molesto tener que estar pendiente de ella en todo momento, especialmente en las fases de combate.

Eileen (Silent Hill 4)

Este personaje de Silent Hill 4: The Room tenía la particularidad de golpearse a sí misma cuando estaba dañada, por lo que el daño se iba incrementando. Ya solo por eso era una verdadera molestia, pero todavía más lo era a la hora de curarla, pues debíamos hacer uso de velas sagradas anti-espíritus para que volviera temporalmente a su estado original. De ello, además, dependía qué final del videojuego nos saldría.

Los hombres de Krew (Jak 2)

La segunda entrega de la saga Jak and Daxter (tal vez la más redonda de la franquicia de Naughty Dog) nos ponía en un buen aprieto en una misión concreta. Nos referimos a aquella en la que debíamos escoltar a los hombres del siempre conflictivo Krew a través de unas ruinas en las que éramos atacados por decenas de enemigos. Cada uno tenía su propia barra de vida para atormentarnos cada vez que un enemigo le golpeaba.

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