Un jugador de Nintendo Switch pone a su pez a jugar y se funde su tarjeta de crédito
Un youtuber acaba con 500 yenes menos tras un extraño experimento.
Desgraciadamente, a lo largo de los años hemos oído todo tipo de historias de niños y adolescentes que gastan miles de euros en juegos online con las tarjetas de crédito de sus padres, pero el caso de hoy es un tanto distinto, ya que no es un niño el protagonista, sino un pez. Lo más gracioso de esta historia es que todo sucedió en directo mientras retransmitía una partida en Youtube.
Por inverosímil que parezca, en un descuido, su mascota fue capaz de ingresar en la Nintendo eShop, agregar fondos con su tarjeta de crédito y descargar varios artículos. ¿Increíble, verdad?
Mascotas gamers
Se trata de un experimento del youtuber japonés Mutekimaru Channel, quien con una serie de intrincadas herramientas fue capaz de monitorear el movimiento de los peces y traducirlo a comandos de juego para ver si un pez podía completar Pokémon Zafiro, y lo consiguió. Le tomó nada menos que 3195 horas, pero logró terminar el juego. En esta ocasión trató de hacer el mismo experimento con Pokémon Escarlata y Violeta, pero no acabó de la misma manera. Contaba ya 1144 horas de juego cuando, en un descanso del directo de Youtube, sin el creador de contenido para arreglar la situación, el juego se cerró de forma inesperada (cosas que pasan) y el sistema siguió recogiendo el movimiento de los peces.
Estos inofensivos animalitos fueron capaces de acceder dos veces a la Nintendo eShop (de forma involuntaria claro, solo son peces), dando la casualidad de que en una de esas visitas dieron con la forma de agregar fondos al monedero del youtuber y gastaron 500 yenes (4 dólares) a través de una tarjeta de crédito que tenía guardada en el sistema. No solo expusieron su información de pago a todos los espectadores, más tarde los peces fueron capaces de comprar un avatar, descargar el emulador de Nintendo 64 y cambiar el nombre de su cuenta de usuario de "Mutekimaru" a "ROWAWAWAWA¥". Todo eso por dejar a un pez sin supervisión durante unas horas, vaya peligro.
El final feliz de la historia es que los peces no sufrieron ningún daño durante este robo de película y que Nintendo le devolvió sus 500 yenes al youtuber tras explicar lo sucedido. Imaginate que eres del SAT de Nintendo y te cuenta un usuario que su pez ha gastado 500 yenes por error, ¿qué pensarias?