La serie de The Last of Us revela un cambio importante en la historia de Tess que se eliminó

The Last of Us es, sin lugar a dudas, una de las franquicias más importantes de esta industria. Naughty Dog consiguió sorprendernos a todos, en los últimos momentos de PlayStation 3, con una obra que nos conmovió, pero que también consiguió aterrarnos e incluso arquear alguna que otra ceja. Su punto más fuerte era, sin duda, la historia que nos contaba, razón por la cual se tomó la decisión de adaptarlo a serie de televisión.

HBO Max cogió el proyecto, y se lo entregó a los responsables de la serie Chernobyl, una producción de gran nivel en esta plataforma. Así mismo, se hizo un casting que sorprendió a muchos, pero el cual ha demostrado ser perfecto cuando se han estrenado los primeros capítulos de esta.

Ahora, hemos conocido que, en su momento, se tenía planeado un cambio muy importante en la historia de la Tess de la serie, interpretada por Anna Torv. Para ello, habrá spoilers de los dos primeros capítulos de esta, por lo que si no los has visto, y tampoco has jugado el videojuego, deberías dejar de leer ahora mismo.

Un cambio que hubiera sido sustancial

Como todos hemos visto, la serie se mantiene muy fiel al juego respecto al destino de Tess. Esta es mordida, y decide sacrificarse en capitolio para que Joel y Ellie puedan escapar y llegar a la casa de Bill. En este sentido, podemos decir que la adaptación a la pequeña pantalla fue totalmente fiel al juego, aunque en un principio no iba a ser tan así.

Curiosamente, del personaje de Tess sabemos bastante poco, y es que su temprana muerte no nos permite conocer mucho de su trasfondo, algo que parece que iban a cambiar en la serie, pero nunca se llegó a hacer. Concretamente, y según ha contado el propio Neil Druckman en el episodio 2 del podcast oficial de la serie, tenían pensado que Tess explicara como en su momento tuvo un marido y un hijo, aunque estos acabaron infectados. Según cuenta, en esta historia, ella fue capaz de matar a su marido, pero nunca fue capaz de hacerlo con su hijo, razón por la que tuvo que encerrarlo en un sótano, donde según cuenta, este seguiría ahí, convertido en un clicker.