Spy x Family arregla uno de sus errores de continuidad de un modo brillante

Spy x Family se encuentra en uno de sus mejores momentos como franquicia, pues la segunda temporada del anime está siendo un gran éxito, sobre todo con el arco de las vacaciones en el crucero, así como también en el manga, el cual podría estar por presentar una gran revelación sobre el pasado de la pequeña protagonista de la familia Forger.

Ahora que Anya podría ser el centro de atención en los próximos capítulos del manga, muchos fans han estado recordando algunos de sus momentos más icónicos en la franquicia, los cuales suelen estar cargados de comedia, como su error al escribir su nombre. Sin embargo, aunque siempre se ha dicho que este es un problema de continuidad, sobre si su nombre se escribe “Anya” o “Ania”, esto podría tener una explicación brillante.

El error de Anya al escribir su nombre ha sido arreglado de forma brillante

Anya suele escribir su nombre como Ania, lo que ha creado un gran problema de inconsistencia en la obra

Desde el inicio de la serie, se ha establecido que la pequeña con poderes psíquicos ha pasado por varias familias y se ha visto obligada a cambiar su nombre hasta conservar el más reciente, Anya, el que tenía cuando fue adoptada por Loid.

Desde entonces, la pequeña se llama Anya Forger y vive felizmente junto a sus padres, Yor y Loid, así como también con su adorable perro con poderes, Bond. Evidentemente, esto es una fachada, pues todos estos personajes tienen sus objetivos individuales, aunque también se ha demostrado que, poco a poco, se han ido convirtiendo en una auténtica familia que se preocupa por todos.

A lo largo de los capítulos, la serie ha mostrado lo que parecían ser errores de continuidad y estaban relacionados con la gramática del nombre de la pequeña, pues en ciertos paneles se podía leer “Anya”, pero en otros “Ania”. Evidentemente, muchos fans se han dado cuenta de esto y lo han atribuido a un problema.

Sin embargo, en un capítulo especial, toda esta situación parece haber sido solucionada de forma brillante.

En el capítulo especial “Misión corta: 11” se ha explicado esta inconsistencia con el nombre de la pequeña. Aquí se puede apreciar que la hija de Loid y Yor ha creado una placa para poner su nombre en su habitación. Entonces, ha escrito su nombre como “Ania”. Después, su padre se le acerca y la corrige, diciéndole que su nombre, en realidad, se deletrea “Anya”, así que ella lo modifica.

Loid corrige el error de gramática de Anya, dejando en claro que estaba originado por desconocimiento de la pequeña

Este capítulo ha dejado en claro que el problema de Anya para escribir su nombre se debe a que, simplemente, ella no sabe cómo deletrearlo correctamente, pues, anteriormente, nunca había asistido a clases. De hecho, en algún punto de la historia se puede ver a su tío, Yuri, intentar enseñarle sobre gramática. Y tras muchos dolores de cabeza, esta le pregunta “¿qué es una gramática?”.

Anya siempre se ha caracterizado por protagonizar muchas situaciones cómicas e hilarantes, por lo que los fans han pensado que este problema de continuidad era algo parecido, pero no es así. Esta explicación, por más sencilla que parezca, funciona de forma brillante para justificar el por qué ella escribe “Anya” en algunos lugares, pero en otros escribe “Ania”.

Además, esta explicación, aunque muchos la podrían considerar como vaga o básica, lo cierto es que encaja de forma coherente con el personaje de Anya, pues ella tiene una personalidad bastante ingenua. Esto la lleva a protagonizar estas escenas cómicas que tanto encantan a los fans.

No es una sorpresa que Anya no sepa escribir correctamente su nombre, pues no conoce de ortografía. Y son todas estas situaciones las que hacen que sea tan sencillo empatizar con la pequeña, pues, en realidad, es una niña que actúa y tiene límites como cualquiera. Aunque, en su caso, ella ha vivido una vida bastante complicada, huyendo de su pasado, así que no le había dado la importancia necesaria a aprender esto, sobre todo si continuamente lo estaba cambiando.

Ya no se puede afirmar que esta inconsistencia se trate de un error de continuidad, sino más bien de la inocencia e ingenuidad de la pequeña Anya, la cual está haciendo su máximo esfuerzo para aprender y disfrutar de su nueva escuela, haciendo amigos en el proceso.