Análisis del PowerA Advantage Wired Controller para Nintendo Switch 2 - Un mando económico con mucho que ofrecer
Una de las primeras opciones de terceros para disfrutar del mando Pro de Nintendo Switch 2 cumple con lo que promete

La llegada de Nintendo Switch 2 ha traído consigo una nueva ola de accesorios diseñados para aprovechar al máximo las capacidades de esta consola. Entre ellos, el PowerA Advantage Wired Controller se presenta como una opción atractiva para aquellos jugadores que buscan un mando asequible sin renunciar a funcionalidades esenciales. Disponible en tres diseños –Mushroom Kingdom, Mario Time y negro clásico–, este controlador promete combinar estilo, comodidad y precisión a un precio competitivo de 39,99 euros. Pero, ¿es realmente una alternativa viable frente al mando Pro oficial de Nintendo? En este análisis exhaustivo, exploramos cada aspecto del PowerA Advantage Wired Controller, desde su diseño y ergonomía hasta su rendimiento en diferentes géneros de juegos, para determinar si es una opción adecuada para el segundo jugador o incluso para el usuario principal.
Ficha técnica
Conectividad por cable USB-C (10 pies/3 metros) e inalámbrica |
Un mando para todos los bolsillos

Un mando con un diseño que cumple bien con las prestaciones de la consola.
Nintendo Switch 2, lanzada en 2025, ha consolidado su lugar como una de las consolas más versátiles del mercado, gracias a su capacidad para adaptarse a diferentes estilos de juego, ya sea en modo portátil, sobremesa o docked. Sin embargo, los accesorios oficiales de Nintendo, como el Pro Controller, pueden ser una inversión significativa, con precios que rondan los 84,99 euros. Aquí es donde entra en juego PowerA, una marca reconocida por ofrecer alternativas de calidad a precios más accesibles. El PowerA Advantage Wired Controller se posiciona como una solución ideal para quienes buscan un mando económico para sesiones multijugador o como respaldo para el día a día.
Con un diseño inspirado en el Pro Controller, pero con características propias como los módulos Hall Effect en los sticks analógicos y botones traseros programables, este mando busca equilibrar funcionalidad y estilo. Sin embargo, su naturaleza cableada y la ausencia de características premium, como rumble HD o soporte para amiibo, plantean preguntas sobre su versatilidad. A lo largo de este análisis, evaluaremos si estas limitaciones afectan su rendimiento y si el mando logra cumplir con las expectativas de los jugadores de Switch 2.
Diseño y acabados: Estilo vibrante con un toque económico

Hay varios diseños disponibles del mando Power A.
El PowerA Advantage Wired Controller está disponible en tres variantes: Mushroom Kingdom, con un diseño pastel inspirado en los personajes de Mario; Mario Time, con un vibrante fondo verde y el icónico fontanero en acción; y un modelo negro mate más sobrio. Para este análisis, probamos la versión Mushroom Kingdom, que destaca por su atractivo visual. Los colores suaves y los personajes como Peach, Yoshi y Mario aportan un encanto que hará las delicias de los fans de la franquicia. Sin embargo, como señalan algunas reseñas, el diseño puede parecer algo “juguetón” en comparación con la sobriedad del Pro Controller, lo que podría no ser del agrado de quienes prefieren un aspecto más premium.
El mando mide 5,87 x 4,09 x 2,44 pulgadas y pesa solo 143 gramos, lo que lo hace significativamente más ligero que el Pro Controller (235 gramos) o incluso el mando de GameCube (210 gramos). Esta ligereza es un arma de doble filo: por un lado, resulta cómodo para sesiones largas, especialmente para jugadores jóvenes o aquellos que prefieren un mando menos pesado; por otro, la sensación de “vacío” puede dar una impresión de menor calidad, ya que el plástico suena hueco al tocarlo. Los acabados, aunque bien ejecutados, no alcanzan el nivel de robustez de los mandos oficiales de Nintendo.
Ergonomía y disposición de botones

En términos generales, es un mando muy cómodo.
Ergonómicamente, el PowerA Advantage se siente cómodo en las manos, con agarres texturizados que se adaptan bien a las palmas, similares a los de un mando de Xbox One. La disposición asimétrica de los sticks analógicos facilita la transición para los usuarios acostumbrados a este formato. Sin embargo, la colocación de los botones Home, Plus, Minus, Capture y C (para GameChat) en una fila debajo del D-pad y el stick derecho es un punto débil. Esta configuración confusa, con botones del mismo tamaño y sin diferenciación táctil, lleva a pulsaciones accidentales hasta que se desarrolla memoria muscular.
El mando incluye dos botones traseros programables (AGL y AGR), que ofrecen una ventaja competitiva al permitir asignar funciones personalizadas. Sin embargo, el proceso de mapeo requiere pulsar un botón “PRGM” en la parte trasera, lo que es menos intuitivo que el sistema de configuración rápida del Pro Controller. A pesar de esto, la programación es sencilla una vez que se domina, y los botones traseros son un añadido bienvenido para un mando en este rango de precio.
Sticks analógicos y tecnología Hall Effect

Los sticks son ergonómicos y muy resistentes a largas sesiones de juego.
Uno de los puntos fuertes del PowerA Advantage es la incorporación de módulos Hall Effect en los sticks analógicos, una característica que lo distingue incluso del Pro Controller de Nintendo, que no incluye esta tecnología. Estos sensores magnéticos sin contacto eliminan el riesgo de drift, un problema común en mandos modernos, garantizando una mayor durabilidad y precisión. Los sticks son suaves, con un recorrido amplio y una resistencia baja que los hace ideales para juegos que requieren control preciso, como shooters o títulos de aventuras en 3D. En juegos como Fast Fusion o Mario Kart World, los sticks respondieron con fluidez, ofreciendo una experiencia comparable a la de mandos más caros.
Sin embargo, los sticks no están exentos de críticas. Al alcanzar los límites de su recorrido, emiten un sonido audible al chocar con la carcasa, lo que puede resultar molesto en sesiones largas, especialmente si estás acostumbrado a la suavidad del Pro Controller. A pesar de esto, su rendimiento general es sobresaliente para un mando de 39,99 euros.
D-pad y botones

La parte trasera es una de las más interesantes del mando.
El D-pad del PowerA Advantage ha recibido opiniones mixtas. Aunque es más grueso y redondeado que el del Pro Controller, algunos usuarios lo encuentran “esponjoso” y menos preciso, lo que puede afectar en juegos que requieren entradas rápidas, como Tetris 99 o Street Fighter 6. En nuestras pruebas, el D-pad funcionó correctamente en la mayoría de los casos, pero en títulos retro o de lucha, donde la precisión es crucial, no iguala la calidad de opciones como el mando de Xbox Series o el 8Bitdo Ultimate 2. Por otro lado, los botones frontales (A, B, X, Y) son clicky y responsivos, aunque algo pequeños y de perfil bajo, lo que puede causar fatiga en sesiones prolongadas de juegos intensos.
Los gatillos y bumpers, por su parte, ofrecen una sensación táctil satisfactoria, acercándose a la calidad del Pro Controller. Sin embargo, los botones traseros programables son algo rígidos, lo que requiere un período de adaptación.
Funcionalidades adicionales

El mando dispone de botón C para GameChat.
El PowerA Advantage incluye un puerto de audio de 3,5 mm, una característica bienvenida para los jugadores que usan auriculares. Además, cuenta con controles de audio integrados que permiten ajustar el volumen, silenciar el micrófono y alternar entre tres modos de ecualización (Standard, Bass Boost, Immersive). Aunque la diferencia entre estos modos es sutil, añaden un toque de personalización que no está presente en todos los mandos de este rango de precio. El botón C, diseñado específicamente para la función GameChat de Switch 2, es un añadido útil, aunque su utilidad depende de la frecuencia con la que uses esta característica.
El cable USB-C de 10 pies (3 metros) incluido es una ventaja significativa, ya que proporciona libertad de movimiento sin la necesidad de baterías. Sin embargo, la conexión cableada es una limitación para quienes prefieren la comodidad de un mando inalámbrico, especialmente en setups donde la consola está lejos del jugador o en hogares con mascotas que puedan enredarse con el cable. Además, el mando no puede despertar la consola desde el modo reposo, una función estándar en los mandos oficiales de Switch 2, lo que puede ser un inconveniente para algunos usuarios.
Rendimiento en diferentes géneros, tanto en juegos de acción como de aventuras

La técnica de conducción es totalmente diferente, aunque cuesta perfeccionarla.
En títulos como Disney Villains Cursed Café o Animal Crossing: New Horizons, el PowerA Advantage se comporta de manera sólida. Los sticks analógicos ofrecen un control preciso para explorar entornos abiertos, y los botones traseros programables son útiles para asignar acciones rápidas, como abrir menús o cambiar herramientas. La ligereza del mando permite jugar durante horas sin fatiga, aunque la falta de rumble HD resta inmersión en momentos clave, como las vibraciones asociadas a eventos en el juego.
En Mario Kart World, el PowerA Advantage brilla gracias a su diseño ergonómico y la respuesta de los sticks. La posibilidad de mapear los botones traseros para acciones como derrapar o usar objetos mejora la experiencia en partidas multijugador competitivas. Sin embargo, la disposición de los botones Home y C puede resultar incómoda en el calor de la partida, ya que es fácil pulsarlos por error.
Para juegos retro o de lucha, el D-pad es el punto más débil del mando. En Tetris 99, notamos algunos errores en las entradas, como caídas accidentales de bloques, lo que puede ser frustrante en partidas competitivas. En Street Fighter 6, el D-pad no ofrece la precisión necesaria para ejecutar combos complejos, lo que hace que este mando no sea la mejor opción para jugadores hardcore de este género.
Limitaciones y compromisos
El PowerA Advantage sacrifica varias características para mantener su precio bajo. La ausencia de rumble HD, controles de movimiento, soporte para amiibo y conexión inalámbrica lo aleja de ser un reemplazo completo del Pro Controller. Estas omisiones afectan especialmente a juegos que dependen de estas funcionalidades, como Super Mario Odyssey, donde los controles de movimiento son esenciales para ciertas acciones. Además, la sensación de ligereza y el sonido hueco del plástico pueden decepcionar a quienes buscan una experiencia premium.
Otro aspecto a considerar es la compatibilidad. Aunque el mando es compatible con la mayoría de los juegos de Switch 2 y también con la Switch original, no funciona con títulos que requieren Joy-Cons exclusivamente debido a su diseño cableado y la falta de sensores de movimiento. Esto limita su versatilidad en ciertos contextos.
Relación calidad-precio

A un precio de 39,99 euros, el PowerA Advantage Wired Controller ofrece una excelente relación calidad-precio. Comparado con el Pro Controller (84,99 euros) o incluso con otras opciones de terceros como el 8Bitdo Ultimate 2 (69,99 euros), este mando es una alternativa económica que no escatima en funcionalidades esenciales. Los módulos Hall Effect, los botones traseros programables y el puerto de audio lo convierten en una opción atractiva para jugadores que buscan un mando secundario o para sesiones multijugador.
Sin embargo, su naturaleza cableada y la falta de características premium lo hacen menos recomendable como mando principal para quienes priorizan la comodidad inalámbrica o necesitan soporte para todas las funciones de Switch 2. Para familias, jugadores ocasionales o aquellos que buscan un mando para el “jugador 2” en títulos como Mario Kart World o Super Mario Party, el PowerA Advantage es una elección sólida y asequible.
Frente al Pro Controller de Nintendo, el PowerA Advantage no puede competir en términos de calidad de construcción o funcionalidades avanzadas. Sin embargo, su precio es menos de la mitad, lo que lo hace ideal para presupuestos ajustados. Comparado con el 8Bitdo Ultimate 2, que ofrece conexión inalámbrica y un diseño más premium por 69,99 euros, el PowerA Advantage se queda atrás en versatilidad, pero supera en precio y en la inclusión del botón C para GameChat. Otros mandos cableados de PowerA son más baratos (24,99 euros), pero carecen de las mejoras tecnológicas del Advantage, como los módulos Hall Effect.
Valoración final del PowerA Advantage Wired Controller para Nintendo Switch 2
El PowerA Advantage Wired Controller para Nintendo Switch 2 es una opción sólida para quienes buscan un mando económico que combine estilo, funcionalidad y rendimiento. Su diseño atractivo, los sticks con tecnología Hall Effect y los botones traseros programables lo convierten en una gran elección para sesiones multijugador o como mando secundario. Sin embargo, la falta de rumble HD, controles de movimiento y conexión inalámbrica, junto con un D-pad mejorable y una disposición de botones confusa, lo alejan de ser un reemplazo completo del Pro Controller.
Para jugadores casuales, familias o aquellos que quieran un mando adicional sin gastar demasiado, el PowerA Advantage cumple con creces. Su precio de 39,99 euros, combinado con características como el puerto de audio y la compatibilidad con la mayoría de los juegos de Switch 2, lo hace una opción atractiva. Sin embargo, si buscas una experiencia premium o necesitas un mando para juegos que dependan de controles de movimiento, es mejor optar por el Pro Controller o alternativas inalámbricas de terceros. En resumen, el PowerA Advantage es un compañero fiable para el “jugador 2” y una adición valiosa a cualquier colección de accesorios para Nintendo Switch 2.
¿Merece la pena el PowerA Advantage Wired Controller? | |
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A favor |
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En contra |
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Conclusiones | El mando Pro de PowerA es una gran alternativa económica para aquellos que no puedan permitirse el precio del mando Pro oficial de Nintendo Switch 2. |