Análisis de Lords of the Fallen - Una barcaza a la deriva entre dos mundos
Analizamos Lords of the Fallen en su versión de PS5.

Con el auge de la franquicia Dark Souls, y especialmente luego del lanzamiento de Bloodborne vimos un auge de esta clase de videojuegos, los cuales se empezaron a conocer como souls-like. Tuvimos obras de todo tipo, desde el propio Lords of the Fallen original, hasta The Surge o Nioh. Por desgracia, si bien muchos de ellos consiguieron tener un gran público, lanzando secuelas más tarde, ninguno de ellos consiguió brillar tanto como las obras en las que se inspiran.
Ahora tras el lanzamiento del magistral Elden Ring, considerado como uno de los mejores juegos de la historia, hemos visto un nuevo auge de este género, y es que ya hemos recibido Lies of P, uno de los juegos más esperados del año, así como Lords of the Fallen, una especie de reboot de esta franquicia, que además ha sido desarrollado por un estudio diferente al original.
Yo ya he podido jugar este tan esperado título, y a continuación os contaré cuál ha sido mi experiencia general con el mismo, aunque desde ya os puedo adelantar que la experiencia general ha sido relativamente agridulce, a pesar de que lo he disfrutado bastante por momentos.
+ Pros
- El diseño de niveles en general es muy interesante.
- La jugabilidad es lenta, pero fluida al mismo tiempo.
- Supone un verdadero reto en muchos sentidos.
- Artísticamente es una verdadera maravilla.
- Contras
- La mecánica de tener dos mundos paralelos se siente altamente desaprovechada.
- Los jefes finales son muy irregulares, con algunos que resultan impresionantes, y otros que no pasan de ser un bache en el camino.
- La localización de los enemigos en los escenarios es de lo más irregular e incluso artificial.
- Cuenta con muchos problemas técnicos.
- Lords of the Fallen: precio, fecha de lanzamiento, plataformas y dónde comprar
- Un reboot que avanza, pero no demasiado
- Un reboot que podría haber dado más de si
Lords of the Fallen: precio, fecha de lanzamiento, plataformas y dónde comprar
Lords of the Fallen | |
---|---|
Plataforma | PS5, Xbox Series y PC |
Fecha de lanzamiento | 13 de octubre de 2023 |
Desarrollador | HEXWORKS |
Género | Souls-like |
Idioma | Textos en español y voces en inglés |
Como ya he comentado, Lords of the Fallen es un nuevo souls-like que llega como una especie de reboot de la franquicia que Deck13 inició en el año 2014. Este nuevo juego nos llegó el 13 de octubre del presente año 2023, recibiendo versiones para PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC, siendo por tanto un juego totalmente exclusivo de la actual generación. Por último debéis saber que cuenta con todos sus textos traducidos al español, aunque las voces solo están disponible en inglés.
Un reboot que avanza, pero no demasiado
Entrando ya en materia, puedo decir que desde su anuncio he visto a Lords of the Fallen con cierto escepticismo. La entrega previa no consiguió convencerme en su momento, y es que si bien fue pionero entre los souls-like, con todo lo que ello conlleva, terminó por sentirse muy lejos de los productos de los que se inspiraba.
Aun así, cuando llegó el momento tomé la decisión de adentrarme en el mismo con los menos prejuicios posibles, especialmente luego de que otros títulos demostraran que los souls-like también tienen madera de GOTY. Por desgracia, cuando he podido jugarlo al fin, he terminado decepcionado por diversos aspectos, muchos de los cuales no tienen mucho que ver con el aspecto jugable como tal, sino que más bien es su apartado técnico el que ha conseguido desesperarme en varias ocasiones.
Donde dos mundos convergen
Empecemos precisamente por lo que más me ha sorprendido de primeras. Por suerte, yo no había visto mucho del juego, y es que si bien como ya he dicho mi primera sensación no era especialmente buena, decidí dejar de visionar material promocional para así llegar limpio al lanzamiento, y por eso pude no tener ni idea de la que sería la mecánica estrella de este título: los dos mundos que convergen.
Por ponerlo muy sencillo, estamos hablando de que tenemos dos mundos en el juego, los cuales convergen en una especie de mismo plano, pudiendo el jugador acceder de uno a otro sin ningún problema gracias a una especie de lámpara que tenemos desde el principio del juego. Esto se ve aprovechado de diferentes maneras, permitiéndonos no solo avanzar a través de los escenarios, con un diseño de nivel excepcional en ese sentido, sino que también hay diferentes puzles de entorno especialmente interesantes aprovechando esta mecánica que, si bien no es novedosa, me ha gustado mucho la idea, aunque la implementación no es especialmente la mejor.
Sí, esta mecánica concreta ayuda bastante a que el diseño de niveles sea muy interesante, pero también tiene dos consecuencias negativas. Para empezar, estamos hablando de que la progresión por los escenarios es más liosa, consiguiendo que muchos usuarios se terminen perdiendo, dado que en muchas ocasiones tendremos que cambiar de mundo para poder avanzar. Asimismo, la verdad es que es una mecánica que complica todo en exceso, en un sentido en el que no esperábamos en un juego de esta clase.

El diseño de niveles en Lords of the Fallen está hecho pensado precisamente en esta mecánica de los dos mundos.
Tengo totalmente claro que uno de los detalles atrayentes de todos los souls-like es su dificultad. Esa sensación de reto, que se culmina con una victoria que llena nuestro organismo de una dopamina extremadamente placentera, es incluso adictiva, pero la verdad es que esto se aplica principalmente al combate. Todos los juegos de este tipo cuentan con cierto reto dentro de sus escenarios, y en general es verdad que Lords of the Fallen cumple con estos estándares, pero hay ciertas situaciones en las que depende demasiado de esta mecánica de cambio de realidades, siendo que en algunas ocasiones es evidente, pero en otras resulta especialmente complicado lograr avanzar.
Más allá del detalle de los dos mundos, tenemos que hablar de un diseño de niveles que es algo irregular. En general en su concepción es excepcional, y no me cansaré de comentar que si bien se vuelve confuso de forma excesiva, dependiendo mucho de esta mecánica novedosa, consigue no solo ser coherente con el escenario, sino fluido e interesante, pero es diferente cuando hablamos de la colocación de los enemigos. Muchos pensaréis que esto es una tontería, pero es una de los detalles más importantes en juegos de este estilo, siendo curiosamente una de las razones por las que Dark Souls 2 es considerado "el patito feo de la saga", como muchos lo denominan. En este caso Lords of the Fallen es un juego de contrastes, y es que si bien en ciertas ocasiones acierta de lleno, en otra tiende a cometer el fallo más típico en esta clase de juegos: colocar enemigos en cada esquina sin tener en cuenta la maniobrabilidad del usuario. Muchos defenderán esto argumentando que de esta manera el reto es mayor, pero hay una ligera diferencia entre ser complicado y ser frustrante, y justo esto último es lo que me he encontrado en varias ocasiones.

Al morir en Lords of the Fallen pasaremos al segundo mundo, perdiendo algo de vida, la cual podremos recuperar golpeando a enemigos.
Todo el mundo es nuestro enemigo
Ya hemos tratado el tema de los escenarios y los niveles, ¿pero qué hay de los enemigos a los que tenemos que enfrentarnos?. Muchas personas dirán que es un detalle menor, especialmente aquellos usuarios que nunca se han adentrado en este género, pero es con estos con los que Lords of the Fallen se juega ser recordado o pasar al total olvido, y por suerte aunque tengo mis reservas en diversos aspectos, puedo decir que cumple en este sentido.
Empezando con el gameplay en general, la verdad es que mi opinión puede ser relativamente diferente a la de gran parte del público. Desde su lanzamiento se ha afirmado que se siente tosco, pudiendo recordar a los primeros títulos que fueron lanzados del género, que resultaban complicados especialmente por la movilidad del personaje. Pues bien, debo decir que no estoy en absoluto de acuerdo con esto. Cierto es que el movimiento de nuestro personaje no será especialmente fluido, pero es que no estamos hablando de un artista marcial o algo del estilo, sino que controlaremos principalmente a un caballero. Por ello debo decir que el set de movimientos de los personajes controlables me parece que van acorde con la ambientación que nos encontramos, y que si bien puede ser molesto en ciertas ocasiones, también es parte de la esencia del juego.
Por otro lado, cuando nos referimos al combate me mantengo en las mismas. Puede resultar tosco en ocasiones, pero no en el mal sentido como tal, y es que no solo es relativamente variado, sino que no consigue sentirse aburrido o repetitivo en ningún momento. Cierto es que en ciertas ocasiones frustra de más, como cuando combatimos a ciertos jefes más complicados, pero la verdad es que es competente. Está claro que no es el mejor sistema de combate que me he encontrado en un juego de este tipo, pero es bastante competente en todos los sentidos, aunque es cierto que muchas veces peca de querer introducir la misma mecánica de los dos mundos que convergen, consiguiendo que se complique en exceso. Esto especialmente lo he notado cuando me he encontrado enemigos que cuentan con una especie de barrera invisible, para la cual tendremos que usar la ya mencionada lámpara para retirárselo, aunque //debido a la ya mencionada colocación de los enemigos resulta muchas veces complicado y frustrante deshacerse de estos enemigos concretos**.

Muchas veces la colocación de los enemigos en el escenario consigue que la experiencia sea frustrante.
Ahora sí, entrando en lo que más puede interesar a un usuario amante de los souls-like, tengo que mencionar a los jefes, los cuales son de nuevo relativamente irregulares. Todos son un verdadero reto, siendo que conforme más avances en la aventura necesitarás mayor control de las mecánicas del juego para poder salir victorioso, pero la realidad es que no todos son esos combates impresionantes que prometían ser. Como en todo hay excepciones, y en es que en ciertos casos he tenido una sensación similar a la que me han transmitido grandes del género, pero no ha resultado ser especialmente regular en este sentido. Eso sí, debo decir que tal y como comentaremos en detalle más adelante, la banda sonora y el excelso apartado artístico consiguen que la mayoría de estos enfrentamientos sean impresionantes, aunque jugablemente no terminen siendo nada del otro mundo.
Por otro lado es necesario hablar de las mecánicas RPG, y es que si bien estos juegos son considerados partes de un género (los souls-like), no dejan de ser títulos RPG con combate en tiempo real y con un enfoque claro en la dificultad de los enfrentamientos. En este sentido no puedo decir que no cumpla, pero la verdad es que no consigue dar importancia a esta serie de mecánicas. Esto ocurre en muchos juegos últimamente, y es que si bien la subida de nivel y el loot existe, carecen de importancia en muchos casos, siendo esto lo que he sentido en Lords of the Fallen. No solo la cantidad cantidad de "experiencia" necesaria para subir de nivel es exagerada, sino que no hace una gran diferente subir al personaje o no hacerlo. Por supuesto, tengo claro que una persona con mucha experiencia y conocimiento de esta clase de juegos podrá, después de mucho tiempo de experimentación podría crear una build que nos permitiría notar una gran diferencia, pero el usuario común sentirá durante gran parte del juego que simplemente sube de nivel por inercia, y no porque sea realmente algo indispensable para la progresión.

Los jefes serán un hueso duro de roher.
Artísticamente es un verdadero deleite
Donde no creo que haya ninguna discusión es en este apartado, y es que desde las primeras imágenes promocionales se pudo notar que el apartado artístico sería sublime, pero con el lanzamiento final he podido notar que esto se ha trasladado al producto final. Todo en este sentido consigue que te enamores de primera, y es que tanto el estilo como la ejecución han resultado ser extenuantes, todo gracias a la utilización de Unreal Engine 5, motor que ha demostrado dar grandes resultados a nivel visual, pero ser complicado de optimizar, algo que también ha afectado a este Lords of the Fallen.
Por desgracia, y aunque me encantaría decir que todo compensa a este problema, pero realmente estamos hablando de un juego que ha sido lanzado con muchos problemas técnicos, los cuales no han conseguido todavía solucionar de forma completa. No solo me refiero a bajones de frames, de los cuales he podido encontrar bastante en la versión de PS5, sino que también hay problemas más graves, siendo especialmente relevantes los crasheos. En un principio fui jugándolo ajeno a este problema, y es que si bien estaba escuchando hablar a compañeros sobre esto, a mi solo me había ocurrido en un par de ocasiones puntuales, pero llegó un momento en el que en una misma sesión se me cerró el juego más de una media docena de veces, lo que es totalmente intolerable.

Artísticamente Lords of the Fallen sorprende de forma muy grata, especialmente en el diseño de enemigos y escenarios.
Estos problemas empiezan a ser una constante en los títulos desarrollados usando Unreal Engine 5, lo que nos puede indicar que estamos hablando de un motor que proporciona grandes resultados a nivel visual, pero que no consigue dar apartados técnicos aceptables. Por supuesto hay excepciones, y con el tiempo estos juegos terminan arreglándose en gran medida, lo que significa que no es que sea imposible optimizar, sino que más bien es probable que estemos hablando de que es mucho más complicado hacerlo.
Más allá de esto, debo recalcar que a nivel visual no tengo ninguna pega. Todo en Lords of the Fallen es artísticamente impresionante, y está ejecutado a las mil maravillas. Desde el diseño de ambos mundos, hasta el de los jefes que nos encontramos por el camino, incluyendo la apariencia de los escenarios y de los enemigos comunes, todo está a un nivel bastante alto.
También está claro que tenía que mencionar el apartado sonoro, y es que en este caso la banda sonora sabe brillar cuando debe hacerlo, pero no se siente especialmente relevante en los momentos más casuales o mundanos. Esto puede ser una decisión de diseño, pero en este caso nos encontramos ante un juego que no frena su ritmo durante mucho tiempo, incluyendo enemigos prácticamente en cada esquina, por lo que pienso que podría haber sido mejor idea dar más dinamismo a las piezas incluidas. Asimismo, debes saber que el diseño de sonido cumple con creces, y aunque no sorprende especialmente, logra que la experiencia sea mucho más inmersiva.

Es en los momentos mundanos donde puede fallar la banda sonora de Lords of the Fallen.
Un reboot que podría haber dado más de si
Cuando empezaba hablando de tener una sensación agridulce no me refería en absoluto a que fuera un mal juego, sino que he podido notar una amalgama de potencial desperdiciado. El gameplay está bien, pero podría haber dado más, al igual que ocurre con la mecánica central de dos mundos paralelos y todo el conjunto de mecánicas RPG. Lords of the Fallen es una buena experiencia, y mejora al original, pero se ve muy lastrado por su falta de ambición en lo jugable y sus evidentes problemas técnicos, lo que consigue que no se posicione como una referencia dentro de su género.
Si te gustan los souls-like probablemente te enamorará, especialmente si el estudio ha conseguido arreglar sus problemas técnicos, pero no te cambiará la vida en absoluto, y aunque no lo pretende en ningún momento, si es verdad que podemos notar que todo en el mismo podría dar más de si.
Este dispositivo ha sido analizado de forma independiente gracias a una cesión por parte de la marca. El artículo contiene enlaces de compra por los que Alfa Beta Juega podría percibir una comisión. Únete al canal de chollos de Alfa Beta Juega para enterarte de las mejores ofertas antes que nadie.