Más te vale aprender inglés para disfrutar de esta joya de 80 horas o estás perdido. Análisis de Octopath Traveler 0

El género RPG es uno de los más complejos en el sector del videojuego. Con tantos años de historia, a veces parece difícil innovar y ofrecer una respuesta a todos esos impulsos que pretenden los usuarios al disfrutar de nuevas propuestas. No obstante, 2025 parece decidido a romper estas leyes no escritas incluso en sus compases finales. Si Clair Obscur: Expedition 33 demostraba en los primeros meses que estábamos ante un año diferente, Octopath Traveler 0 se encarga de refrendarlo en estos últimos coletazos.

Ha sido un viaje complejo el de la nueva obra de Square Enix. Prácticamente 80 horas para poder completar su historia, motivo por el que este texto llega más tarde su fecha de embargo. Todo ello con esa vocecita repitiéndose todo el rato en la cabeza: ¿por qué no han decidido traducir esta joya para que llegue a más público? Porque ese es el gran problema de Octopath Traveler 0, la cantidad de gente que se quedará sin descubrirlo por la barrera del idioma. ¿Provoca eso que se baje la persiana y la luz que debería entrar se vuelva tenue transformando una estancia de color en algo lúgubre? Pues te lo cuento en detalle en el análisis completo de Octopath Traveler 0 en PS5 Pro.

Octopath Traveler 0: precio, plataformas y dónde comprar

El nuevo título de rol, Octopath Traveler 0, se estrenó el 4 de diciembre de 2025. Desarrollado por Square Enix, este RPG promete expandir la aclamada saga con su distintivo estilo gráfico HD-2D. El juego es un lanzamiento masivo, disponible en PS5, PS4, Xbox Series X|S, Xbox One, Nintendo Switch 2, Nintendo Switch y PC. La versión utilizada para nuestro análisis es la de PS5. En cuanto a la localización, el título se enfocará en el idioma anglosajón, ofreciendo voces y textos completamente en inglés para narrar las historias entrelazadas de sus protagonistas, algo que ha generado mucha polémica. Este es un lanzamiento crucial para los seguidores del JRPG clásico con estética moderna.

La segunda época dorada de un género de leyenda

Square Enix no se anda con chiquitas cuando decide revivir un género, y la saga Octopath Traveler es la prueba viviente de que la nostalgia bien entendida es un motor de excelencia. El primer juego ya nos conquistó con su belleza HD-2D y su estructura de ocho relatos individuales, demostrando que había un público hambriento por las complejidades tácticas y la estética pixelada de antaño. Pero, como suele pasar, la secuela llega para decirnos: "Sí, me gustó la primera, pero mira lo que puedo hacer cuando de verdad pongo toda la carne en el asador."

Octopath Traveler II no se queda en la simple premisa de ser una secuela (o precuela), sino que escribe una carta amor apasionada y metódica al JRPG de la vieja escuela, aquel que te hacía dibujar mapas en una libreta, guardar partida cada tres pasos, y pasar horas experimentando con las combinaciones de habilidades. Es un juego que te abraza con lo familiar y te reta con lo nuevo, ofreciendo una experiencia que es, a la vez, épica en su alcance y profundamente personal en su ejecución.

El miedo a arriesgar puede ser un paso atrás, pero define su esencia

La ausencia de los ocho protagonistas se siente extraña.

Este juego no es un paso adelante para el género, y lo digo sin miedo. Pero sí es una puesta en valor brutal de una manera muy concreta de entender el rol por turnos. Octopath Traveler 0 te atrapa con la promesa de desvelar los orígenes de la leyenda de Orsterra, te desafía con un combate táctico profundo, y te recompensa con la satisfacción de trazar una estrategia tan perfecta que el enemigo ni te toca. Es un título con fallos evidentes y un corazón que late al ritmo de un juego de móvil extirpado, pero que logra mantenerte absolutamente enganchado durante sus más de 80 o 100 horas.

Y aquí es donde, lamentablemente, hay que empezar el análisis con la noticia que te rompe el alma. Octopath Traveler 0, al igual que el reciente Final Fantasy Tactics HD, llega con los textos únicamente en inglés. Si bien hay juegos donde esto puede ser perdonable, en un JRPG donde la historia, los diálogos y la personalidad de los héroes son un pilar fundamental de la experiencia, esta ausencia de traducción al castellano es un paso atrás doloroso y un jarro de agua fría.

La aventura cumple con las grandes necesidades de un RPG.

No puedo recomendar este título a nadie para quien el idioma suponga un problema. Los JRPG son un género de inversión narrativa, de leer muchísimo, y prescindir de una victoria que, como jugadores, creíamos haber conquistado hace ya mucho tiempo, es una pena mayúscula. Si este impedimento lingüístico no supone una barrera, entonces sí, estás de enhorabuena, porque bajo esta capa de frustración idiomática, se esconde una muy buena entrega que sabe unir tradición y progreso.

Cuando El Señor de los Anillos conoció a Final Fantasy

La historia vuelve a ser el elemento central del juego.

Aquí es donde Octopath Traveler 0 exhibe su naturaleza de adaptación móvil y su relación más extraña con el jugador. El juego es una precuela que puede jugarse sin problemas, incluso si no has tocado los otros títulos. Pero introduce un cambio polémico: la saga abandona la premisa de ocho historias de personajes predeterminados para centrarse en un único protagonista que creamos nosotros mismos. Este héroe, que permanece mudo a lo largo de la aventura, arranca con una motivación clara: la venganza contra una tríada de poderosos tiranos que arrasaron su villa natal, Wishvale.

Este es un juego que se podría describir como “El Señor de los Anillos mezclado con Final Fantasy IV”. El grueso de la aventura gira en torno a unos anillos divinos que corrompen a sus portadores (los reyes), una idea que, aunque manida, es infalible para el gancho emocional. Nuestro protagonista es ungido como "El Elegido" para apañar lo mal que le va al mundo.

El problema principal radica en la estructura narrativa, que se siente dividida, obvia y a trancas y barrancas. La trama se divide en tres líneas principales, cada una dedicada a un tirano, que no podemos completar de forma lineal. Esto genera situaciones de auténtica urgencia que se quedan en el aire porque "debemos antes completar el capítulo de otra de las tramas", rompiendo el ritmo y dejando la narrativa "algo extraña".

Los personajes van ofreciendo su personalidad poco a poco.

El protagonista a menudo se siente como un espectador mudo que va haciendo cositas para que la trama avance, sin que le afecte siempre directamente. La inconsistencia de su leitmotiv es palpable: ¿por qué sigue buscando reyes y anillos por aquí y por allá si podría irse a casa? La respuesta es que el juego te unge como el elegido para que no hagas demasiadas preguntas.

Sin embargo, en su mejor versión, Octopath Traveler 0 tiene momentos brillantes. Es un juego que le tiene muy bien cogido el punto al rollo shakespeariano, con muchas traiciones, desgracias familiares, suicidios y giros lacrimógenos que te recuperan constantemente. Y cuando el juego se pone más Tolkien que Shakespeare, con la subtrama de la reconstrucción de Wishvale, enamora.

Esta mecánica de juego paralelo es una de las novedades más satisfactorias. El protagonista dedica tiempo a buscar nuevos habitantes, materiales y recursos por todo el mundo para repoblar y volver a levantar su aldea. Aunque no es mecánicamente revolucionario, es muy chulo el cariño que le pones a repoblar tu Comarca, y el remanso de paz que esta aldea reconstruida ofrece contrasta maravillosamente con lo zumbados que están los reyes del resto del continente. Es un motor emocional que da sentido a la búsqueda del hogar en medio de la épica política y la guerra.

El combate sublime que se espera de un fantástico RPG

Los combates masivos son espectaculares.

Si la historia es irregular y te genera una relación difusa, el combate es la razón por la que te quedas hasta el final. Octopath Traveler 0 toma el sistema clásico y lo eleva de forma significativa, resultando en un apartado muy divertido y profundamente estratégico. La gran novedad es que manejamos una party de ocho personajes, distribuidos en dos filas de cuatro, entre las cuales podemos rotar miembros de forma individual. Aunque parezca difícil de manejar, el juego se las apaña para hacerlo muy claro y, sorprendentemente, ágil.

El sistema de Puntos de Batalla (BP) y Quiebra se mantiene: acumular BP para potenciar y aumentar el número de ataques, gestionarlos perfectamente para romper los escudos del enemigo y dejarlos atontados para el daño masivo. Pero la fila de ocho añade capas tácticas. En este sentido, existe una rotación estratégica en la que puedes atacar con uno de la pareja mientras el otro acumula BP en la fila trasera, o poner en pareja a un curandero con un personaje de ataque.

El sistema de quiebra vuelve a estar presente.

Por otro lado, también existen las sinergias masivas. Al tener ocho héroes con multitud de habilidades activas y pasivas, las posibilidades de sinergia son enormes. La maestría radica en trazar una estrategia tan bien medida que el enemigo no sea capaz ni de llegar a dañarte, encadenando rotura de escudos y debilidades de forma continuada y optimizada. Y, por último, los combates tienden a ser más largos, ya que al tener más combatientes, el juego se permite tener batallas más largas y más duras. Los jefes tienen muchos escudos y te exigen más reflexión.

La jugabilidad es muy, muy adictiva. Aunque al principio las batallas pueden sentirse lentas, todo cambia cuando completas tu equipo de ocho miembros y localizas a los compañeros que tienen las habilidades perfectas para machacar a golpes debilitadores a sus enemigos. El juego premia este dominio de sus sistemas con experiencia extra al final de la batalla. Aunque se nota el grindeo inevitable que imponen ciertos jefes, la calidad del combate hace que "no me haya saltado un solo combate", porque es parte indivisible de la experiencia.

Un reclutamiento de héroes que parece traicionar el origen de lo que hizo grande a Octopath

Aunque Octopath Traveler 0 se esfuerza en dar personalidad a los personajes, no es tan efectivo como sis entregas anteriores.

Octopath Traveler 0 es un juego con decenas de horas de contenido, rondando las 100 horas a poco que el jugador se entretenga. Más allá de la trama principal, se añaden constantemente nuevas posibilidades en forma de habilidades, trabajos y aliados para el protagonista, invitando a la experimentación constante.

El juego incluye la opción de reclutar a nuevos personajes para tu equipo, lo cual es de lo mejor que se puede hacer en un JRPG. Sin embargo, en un reflejo de su origen móvil y su diseño encorsetado, el reclutamiento no es orgánico como en un Suikoden II. En lugar de buscar un personaje con pinta de protagonista de anime, verás un cartel rojo que te indica que esa persona se puede reclutar, convirtiendo la búsqueda en una "tareíta más" que se hace cuando el juego quiere que lo hagas. Además, la pantalla se ve extrañamente poblada con el protagonista y los siete que le siguen a todas partes, llegando a suspender la credibilidad. Pese a esto, el juego sí se esfuerza por dar un buen trasfondo a estos personajes con momentos de charla entre ellos.

Hay multitud de personajes que dan forma a la historia.

Una de las mecánicas que sí se ha visto afectada por su enfoque narrativo de "Elegido" son las acciones de senda. Mientras que en los juegos anteriores dependían de las habilidades únicas de cada héroe en tu equipo, aquí al depender de nuestro versátil protagonista, se ha optado por dar tres acciones preestablecidas a cada NPC con el que interactuamos. Esto hace que la sensación de descubrimiento sea mucho menor, pasando a ser una forma de "completar" los pueblos para ganar objetos o compañeros más baratos, desde un punto de vista puramente material. Se pierde la magia y la variedad de interacción.

La magia indeleble del estilo HD-2D que ya es todo un referente

El diseño artístico vuelve a ser una completa gozada.

El estilo visual HD-2D ha sido siempre la gran bandera de la saga, y aunque los críticos señalan que la estética de Octopath Traveler 0 está un peldaño por debajo de Octopath Traveler II o los remakes de Dragon Quest, sigue siendo innegable la belleza que desprende. El motor ha sido adaptado con maestría para llevar el pixel art al contexto de consola, aunque los sprites de los personajes que reclutamos, herencia directa del gacha móvil, se sienten más pixelados de lo habitual. Esto no es falta de ambición, sino una elección estética que busca evocar las experiencias del pasado con una paleta de colores menos saturada que sus hermanos mayores.

A nivel sonoro, el excelente trabajo de Yasunori Nishiki expande el universo musical de Orsterra, recuperando y modificando algunas melodías de la primera entrega. El apartado audiovisual en su conjunto es un deleite, con un feedback de las acciones y unas animaciones que hacen que el juego se sienta ágil y responsivo, especialmente durante los combates. La espectacular banda sonora es, de hecho, una de sus grandes virtudes y parte indivisible de la experiencia. El doblaje al inglés también es realmente bueno, pero... ya sabes cuál es el problema en este sentido, ¿no?

82Sobre 100

Valoración final de Octopath Traveler 0

Octopath Traveler 0 es un juego que genera ciertas dudas por sus inconsistencias narrativas, secuencias lentísimas (aunque se pueden acelerar, por algo será) y un diseño que te repatea por el poco espacio que te deja para pensar dónde ir o qué hacer. Pero toda relación tóxica se basa en que te acabe gustando algo que no te conviene, y aquí ese "algo" es el combate. La buena idea de las dos filas, el dominio del Quiebre/Potencia, el reclutamiento de nuevos héroes, las muchísimas horas de juego y esa mezcla en su tono entre Final Fantasy, Tolkien y Shakespeare, me han terminado de convencer. No es una obra maestra, no inventa nada, y se hace largo.

Sin embargo, su jugabilidad es una maravilla capaz de resistir perfectamente el paso de sus numerosas horas. Si bien no va a pasar a la historia del género como uno de sus títulos más memorables, sí lo hará como uno extremadamente disfrutable que reivindica la solidez de los pilares del rol por turnos. Si no sabes hablar inglés ni lo intentes, pero a poco que te hayan gustado los anteriores y si lo que aquí hemos relatado te suena bien, es una compra bien hecha.

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