Quería creer que Ubisoft lo iba a bordar con Assassin’s Creed Shadows, pero se ha quedado a medias. Análisis en Nintendo Switch 2

De la saga Assassin’s Creed siempre se esperan proyectos ambiciosos que logren que los jugadores conecten con la cultura en la que se desarrolla la historia de turno. Shadows no fue la excepción, y en su fecha de lanzamiento original, el 20 de marzo de este 2025 que está cerca de terminar, aterrizó con unas expectativas enormes al explorar una época y un lugar tan popular como el Japón feudal.

Con esta entrega la saga de Ubisoft volvió a apostar por una experiencia que combina libertad, narrativa y un gran nivel técnico, manteniendo la esencia que la ha hecho grande. Lo mismo con los pilares de su jugabilidad, uniendo acción, sigilo y exploración de un mundo abierto que prometía resultar envolvente.

Con todas estas cartas sobre la mesa y después de ver su rendimiento en el resto de consolas, parecía todo un reto que Switch 2 consiguiese mover un título de estas características. Un mapa extenso, multitud de NPCs y efectos visuales son suficiente para poner a prueba a cualquier consola portátil.

Por eso durante los últimos días que he podido probar el juego en esta plataforma he querido comprobar de verdad cómo se desenvuelve y qué tal rinde este port tan esperado. Las sensaciones generales son positivas, concluyendo en que Assassin’s Creed Shadows en Switch 2 ofrece un rendimiento sólido y fluido en líneas generales, pero también deja que desear en algunos puntos que, para mí, son difíciles de perdonar en su lanzamiento.

Assassin’s Creed Shadows: precio, plataformas y dónde comprar

Assassin’s Creed Shadows es la última gran entrega de Ubisoft para esta saga. Después de demostrar sus posibilidades en el resto de consolas de última generación, esta historia ambientada en el Japón feudal llega a Nintendo Switch 2 para poner a prueba el dispositivo híbrido. En el lanzamiento de esta versión, que tuvo lugar el día 2 de diciembre, se mantiene intacto el núcleo del juego, con su mundo abierto amplio, la dualidad jugable entre Naoe y Yasuke, el énfasis en el sigilo y el combate. El port no incorpora grandes funciones específicas para este hardware y llega con textos y voces en castellano.

Un viaje al Japón Feudal

Aunque en el análisis original de Assassin’s Creed Shadows ya compartimos con vosotros cada detalle del juego, nunca está de más refrescar la memoria y hablar de cuál es exactamente la propuesta de este título. Nos lleva al Japón feudal, un escenario que ofrece un inmenso número de cara a la jugabilidad. El juego presenta una estructura de mundo abierto en la que destacan dos protagonistas, Naoe y Yasuke, que aportan un enfoque dual tanto narrativo como jugable.

El gameplay combina elementos clásicos de la franquicia como el movimiento en sigilo, el combate dinámico y el parkour, que se unen a un sistema que busca ofrecer una experiencia más estratégica y táctica en la que cada misión puede abordarse de diferentes formas. Este título apuesta por un mundo detallado y vivo, con una alta densidad de NPCs, ecosistemas y eventos que buscan crear una sensación de inmersión.

Sin duda uno de los puntos donde Assassin’s Creed Shadows pretendía destacar desde el principio es en su nivel técnico. Es un juego diseñado para aprovechar la potencia de las consolas de última generación, con un apartado gráfico detallado, efectos de iluminación global muy trabajados.

Este último aspecto es el que hace que su llegada a Nintendo Switch 2 despierte tanta curiosidad, porque es una nueva prueba para marcar el techo de la consola híbrida y para demostrar cuál puede ser el camino a seguir para adaptar las grandes producciones a este dispositivo.

Una grandísima adaptación, pero solo por momentos

Como decía, el reto que supone llevar un juego tan ambicioso a una consola híbrida es motivo de interés, y lo cierto es que el resultado tiene muchos matices. Assassin’s Creed Shadows en Nintendo Switch 2 deja una impresión globalmente positiva porque en términos de rendimiento el juego se mantiene sólido en cualquier situación y llega sin recortes respecto a las otras versiones. No importa que cruces a toda velocidad a caballo ciudades repletas de NPCs, que estés envuelto en combates intensos rodeado de enemigos o que atravieses zonas con gran carga gráfica como un bosque lleno de follaje.

No hay caídas apreciables de FPS ni tirones que rompan la experiencia, y los tiempos de carga se sitúan dentro de lo razonable. Está claro que se han sacrificado ciertos detalles visuales respecto a las versiones de sobremesa para alcanzar esta estabilidad, pero es una decisión lógica y bien ejecutada.

A lo largo dl juego hay detalles que dejan que desear gráficamente

El apartado gráfico, en cambio, es donde más se notan las concesiones. En general, el juego luce muy bien y el mundo mantiene su coherencia visual, pero hay momentos puntuales, como determinadas cinemáticas o algunas zonas del mapa, donde la calidad desciende. Las texturas pierden definición, los elementos pequeños tiene muy poco detalle o las líneas se vuelven algo toscas, rompiendo esa armonía. No afecta a la jugabilidad, pero sí transmite la sensación de que algunas áreas no están tan pulidas como deberían, algo inesperado en un lanzamiento de este calibre.

De hecho, creo que lo peor es precisamente comprobar constantemente cómo hay un trabajo sobresaliente en algunos lugares o con algunos personajes, siempre desde el punto de vista gráfico, y que, de repente, te encuentres con fuegos que son píxeles enormes o cascadas de agua a una resolución muy baja. Es una sensación que rompe con esa inmersión y un punto a tener en cuenta si quieres jugar a este título. Aun así, confío en que con actualizaciones esas zonas se irán refinando hasta que quede a la altura del resto del juego y, entonces sí, quede un producto redondo.

Jugar en la versión portátil siempre es una opción

El propio juego te avisa de alguno de los cambios al jugar en modo portátil

Otra de las mayores dudas que puede despertar la versión de Switch 2 es cómo es la experiencia jugando en su versión portátil. Es obvio que esto implica perder parte del detalle, simplemente por el tamaño y resolución de la pantalla, y Shadows no escapa a ello. Aun así, el equipo ha logrado mantener intacto lo importante, como la distancia de dibujado, la densidad del follaje o el comportamiento de la iluminación. Todo esto se conservan a un nivel notable, sin recortes drásticos que comprometan la ambientación.

Lo más visible es la reducción en la calidad de algunas texturas pequeñas y la adaptación automática del tamaño de la fuente fuera del dock, un recordatorio sutil de que estamos en un entorno más compacto, pero que no afecta a la claridad general.

Assassin’s Creed Shadows se disfruta más en una pantalla grande, pero sigue siendo buena opción para la variante portátil

Más allá del cambio de pantalla, la experiencia portátil no presenta diferencias reales respecto al modo televisor. El HUD se lee bien, el control responde con precisión y navegar por el mundo es igual de cómodo. Simplemente, el juego luce más en grande, donde se aprecia mejor todo el trabajo artístico del Japón feudal.

Con esto quiero decir que si estás en casa y tienes la opción, siempre vas a preferir jugar en esa pantalla grande donde Shadows luce mucho más, pero no es un juego que vas a descartar para viajes porque no se puede disfrutar en una pantalla pequeña.

Assassin’s Creed Shadows, ajeno casi por completo a las funciones de Switch 2

Apenas explota las funciones especiales de Switch 2, pero tampoco se echa de menos

Para terminar, hay dos puntos más que quiero tratar. Primero, yo he jugado con los joycons en el soporte y la experiencia ya ha sido muy buena. Posiblemente con el mando como tal sea un poco mejor porque es un título pensado para ello, pero no vas a perderte nada si no cuentas con él.

El segundo aspecto, y también está relacionado con el hardware de Switch 2 como tal, es cómo Assassin’s Creed Shadows aprovecha las funciones únicas de la consola. Más allá de incluir la posibilidad de interactuar con los apartados del menú de pausa, como el mapa, a través de la pantalla táctil y de otros detalles como ordenar frenar al caballo con un movimiento de los joycons, no hay ninguna novedad más. Tampoco creo que sea un punto demasiado negativo, el título funciona sin, por ejemplo, usar los mandos como ratón, así que no se echa de menos. Sin embargo, sí es algo que está bien tener en cuenta.

Valoración final de Assassin’s Creed Shadows en Nintendo Switch 2

Si no has tenido la posibilidad de disfrutarlo en otra consola, Switch 2 es una opción muy válida

Assassin’s Creed Shadows llega a Switch 2 como un port que, en líneas generales, cumple con lo que se esperaba de él, sobre todo después de que otros títulos hayan demostrado ya de sobra que la potencia de la consola de Nintendo no es ninguna broma. El rendimiento es su mayor fortaleza porque el juego se mantiene estable en cualquier situación, sin caídas apreciables de framerate y con tiempos de carga razonables, algo fundamental para un título de mundo abierto tan ambicioso y que pretende crear una experiencia inmersiva. En este sentido, Ubisoft ha logrado que la experiencia jugable sea prácticamente idéntica a la de las versiones de sobremesa, sin recortes en contenido ni sacrificios que alteren la forma de jugar.

Sin embargo, lo que más pesas en este juego la clara desigualdad en el apartado gráfico. Shadows ofrece momentos visualmente impresionantes en Switch 2, demostrando que no es problema de la consola no llegar a cierto nivel de rendimiento. Una brillantez que evidencia más que algunas zonas y cinemáticas no han recibido el mimo necesario, con texturas que pierden demasiada definición o donde el acabado simplemente no está a la altura. No arruina la experiencia, pero sí deja la sensación de un trabajo irregular que debería haberse cuidado más en su lanzamiento.

Si con el tiempo se terminan de pulir algunos detalles gráficos, Assassin’s Creed Shadows será todo un ejemplo

El lado bueno es que una gran parte de estas carencias no se acusan tanto si juegas en modo portátil, porque sí, este Assassin’s Creed se puede disfrutar perfectamente de esta forma. Mantiene su esencia sin comprometer la jugabilidad, aunque siempre que puedas es mejor disfrutarlo en una pantalla grande. Por el resto, también quiero recordar que la integración con las funciones específicas de Switch 2 es mínima, una "debilidad" que apenas se echa de menos porque la adaptación no necesita realmente de esas características para brillar en lo importante.

Así que, en conjunto, este port de Assassin’s Creed Shadows es una propuesta sólida, especialmente para quienes valoren la posibilidad de vivir esta superproducción en formato híbrido. Si buscas jugarlo en su mejor versión, las consolas de sobremesa siguen ofreciendo un acabado más pulido; pero si solo tienes la consola de Nintendo en casa o si valoras mucho esa versatilidad, aquí tienes una versión robusta, completa y técnicamente competente. Si encima recibe las actualizaciones correspondientes para arreglar los fallos gráficos, esta edición será tan válida como cualquier otra.

Este dispositivo ha sido analizado de forma independiente gracias a una cesión por parte de la marca. El artículo contiene enlaces de compra por los que Alfa Beta Juega podría percibir una comisión. Únete al canal de chollos de Alfa Beta Juega para enterarte de las mejores ofertas antes que nadie.