Primeras impresiones de Mario Strikers: Battle League Football - El partido más eléctrico

A lo largo de los años, hemos visto a Mario en muchas aventuras. Se ha enfrentado a Bowser decenas de veces, ha participado en los Juegos Olímpicos y ha competido en carreras de karts. Con mayor o menor éxito, el fontanero ha hecho lo que a Nintendo le ha dado la gana, incluso jugar al fútbol. El balón vuelve a rodar en Mario Strikers: Battle League Football, una entrega desarrollada de nuevo por Next Level Games que a priori tiene una jugabilidad más profunda y eléctrica. Este juego se lanza el 10 de junio y ya lo hemos probado.

Mario Strikers tiene algo que contagia desde el primer contacto. Y no sólo es su estilo artístico, mucho más desenfadado y gamberro. Es fácil conectar con el juego, accesible para todos los usuarios y una propuesta muy completa en cuanto a mecánicas. Rematar a portería, pasar, regatear, hacer entradas... Estas son las principales habilidades de Mario y sus amigos durante un partido, pero este fútbol arcade llega más lejos todavía. Las posibilidades son enormes con Mario Strikers: Battle League Football.

El 'jogo' bonito

A través de todas esas mecánicas es posible elaborar jugadas resultonas en un campo más pequeño de lo que nos gustaría. Este Mario Strikers tiene muy buenas ideas para que los partidos sean realmente reñidos y emocionantes para el jugador. Tiene un modo entrenamiento para aprender todos los movimientos disponibles, ya que su ejecución tiene cierto truco. Por una parte, hay que conseguir el timing perfecto, pero no hay que olvidar que el fútbol es un deporte de equipo.

A diferencia de otros juegos de fútbol, aquí no sirve correr con un mismo personaje y disparar de cualquier manera. Nos ha sorprendido lo exigente que puede ser el juego y eso habla muy bien de la jugabilidad y la IA. Los jugadores tienen muchos recursos para marcar goles, algunos más efectivos que otros. Pero principalmente se tiene que conseguir el timing perfecto a la hora de rematar, mientras mantienes al rival lejos del balón. Por tanto, es posible hacer un lanzamiento desde la distancia o jugar al primer toque para que el balón acabe en el fondo de la red.

Las combinaciones son más variadas de lo que imaginas. Con las mecánicas de pase es posible hacer paredes, desplazamientos largos e incluso autopases para zafarte en carrera del defensor. Hay varios tipos de entradas para robar el balón, pero aquí todo está permitido. Además de no haber infracciones, los jugadores pueden empujar a un compañero de equipo para golpear o alcanzar a un rival. Esto hace que los controles sean realmente útiles para varias situaciones, tanto en ataque como en defensa.

No queremos ser resultadistas, pero al final lo que importa es marcar goles. Y sólo hay un disparo imparable que se consigue con una orbe que concede una habilidad especial a todo el equipo: el hipertrallazo. Cuando el jugador carga el disparo, se ralentizará el tiempo y esta vez aparecerá una línea dividida por segmentos y el jugador tiene que acertar con las dos marcas azules. No creas que te iban a regalar un gol, en Mario Strikers todo se consigue por méritos propios.

En cambio, si no aciertas en esas líneas hay muchas posibilidades de que el portero ataje tu disparo. En ese momento, el jugador que defiende puede controlar momentáneamente al portero para detener el disparo con un QTE con un medidor. Ahora bien, la estadística de técnica es diferencial en el hipertrallazo, lo que permitirá que sea más fácil o difícil completar con total éxito este disparo tan potente. De hecho, los personajes y atributos son elementos que le dan mayor profundidad al juego.

Objetos especiales, atributos y accesorios

Aquí también entran en juego los objetos que aparecen aleatoriamente en el campo y son ventajas que pueden marcar la diferencia. No es la solución a la falta de puntería, pero pueden dejar fuera de juego (no literalmente) a los rivales. Hay dos espacios para objetos y tres tipos de bloques con objeto: el multicolor lo puede coger un jugador de cualquier equipo, mientras que los otros dos son del color de uno de los equipos y no se pueden robar. Si intentas coger un objeto del equipo contrario, tendrás una penalización.

Cada equipo puede acumular dos objetos y utilizarlos cuando quiera.

Hay 6 objetos en total y cada uno tiene un efecto positivo o negativo: estrella, caparazón verde, plátano, champiñón, Bob-Omb y caparazón rojo. La estrella tiene un efecto positivo en el equipo, ya que concede invencibilidad temporal a quien lo coge, mejora sus atributos y puede evitar a cualquier rival que entre en contacto con él. El champiñón también es un potenciador que aumenta la velocidad temporalmente, una pequeña ventaja para escapar de tus perseguidores.

El caparazón verde se lanza al campo y puede tumbar a los jugadores que encuentre, mientras que el caparazón rojo es imparable y teledirigido. Algo similar ocurre con Bomb-Omb, produciendo una explosión al jugador que controle el balón. Y por último, no podía faltar el plátano en un juego de Mario. Cualquier jugador que pise este objeto, caerá al suelo irremediablemente. Por tanto, los objetos especiales hacen que el juego sea mucho más divertido sin estropear el ritmo del partido.

Por último, habría que mencionar la configuración de los equipos, algo que vuelve a estar en manos de los jugadores. No hay que subestimar esta opción para crear un equipo potente y equilibrado. En su lanzamiento, Mario Strikers: Battle League Football tendrá 10 personajes diferentes con sus propios atributos (fuerza, velocidad, disparo, pase y técnica). Huelga decir que Bowser o Donkey Kong pueden ser los mejores defensores (más fuerza/resistencia), mientras que Estela o Luigi tienen mejor técnica.

Cada personaje tiene diferente distribución de atributos.

Esto no es definitivo y aquí viene el truco final. Los jugadores pueden comprar accesorios con la moneda del juego. Estos objetos son cosméticos y también mejoran los atributos de los personajes en detrimento de otras estadísticas. Por ejemplo, un casco puede mejorar varios puntos el pase y restar la velocidad. De esta forma, puedes hacer las combinaciones que quieras, manteniendo siempre cierto equilibrio en los partidos. Se puede mejorar al máximo (25 puntos) una estadística como la técnica, que te permitirá tener más opciones en los letales hipertrallazos.

Sin duda, los accesorios pueden ser un gran motivo para jugar continuamente y no abandonarlo. Cada personaje tiene sus propios accesorios y no se pueden compartir, divididos en categorías según la parte del cuerpo. Además de darle un toque diferente a los personajes de Super Mario, más allá de las equipaciones reglamentarias que son meramente estéticas.

Juego multijugador local (1-8 jugadores)

Mario Strikers: Battle League Football no tiene modo historia ni lo necesita. Es un juego centrado en el modo multijugador local y online que se presta a recibir actualizaciones para incluir modos, torneos en línea o nuevos personajes y accesorios. Así que Nintendo tiene una buena ocasión para explotar este título con mucho contenido porque lo que hemos podido probar está muy limitado de momento. No obstante, el multijugador es el principal reclamo para jugar Mario Strikers y elaborar jugadas con el resto de jugadores.

El orbe es un objeto especial para activar el hipertrallazo.

El multijugador permite partidos de hasta 8 jugadores en local y online, por lo que es una buena excusa para reunir a tus amigos. Nosotros hemos jugado partidos de 2v2 jugadores o 4 contra la máquina en local y el resultado ha sido tremendamente divertido. Pero tranquilo porque ya está disponible una prueba gratis del juego para los suscriptores de Nintendo Switch Online que puedes descargar. Así puedes comprobar por ti mismo todo lo que puede ofrecer este Mario Strikers.

Conclusiones de Mario Strikers: Battle League Football

Es posible que estemos ante el partido más importante de Mario. Ni Champions League ni nada. Mario Strikers: Battle League Football tiene buena base y predecesores, pero quiere ir un paso más lejos y mostrar que el fútbol arcade puede ser más ambicioso. El tiempo que hemos jugado apenas nos ha servido para aprender todos los controles y mecánicas disponibles, pero masterizarlo es otro asunto. Un juego accesible, pero exigente.

Se pueden hacer equipos muy equilibrados o combinaciones más locas con los accesorios. De momento son un buen motivo para seguir jugando porque se puede mejorar las estadísticas y hay más progresión de los personajes. Pero en cuanto a contenido, esperamos que reciba más actualizaciones en los próximos meses porque las posibilidades pueden ser enormes. Sobre todo si hablamos de personajes y modos de juego. También queremos destacar el estilo artístico del juego, mucho más urbano con secuencias y efectos realmente espectaculares.

Cada personaje tiene un hipertrallazo diferente con una secuencia muy llamativa.

Una vez más, Nintendo apuesta por un título para reunir a los jugadores en la misma sala (tanto virtual como física) y con los elementos de Super Mario como estandarte. Un matrimonio bien avenido con una jugabilidad más profunda de lo habitual que puede tener mucho potencial. No obstante, hay que ver si la versión final de Mario Strikers: Battle League Football nos puede dar más horas de juego en un futuro para no olvidarlo en una estantería. Mario no se merece eso.

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