Esta mujer es una de las mejores dobles de riesgo de Hollywood, pero pocos reconocen su nombre

A pesar de ser una pieza clave en diferentes producciones, esta experta en acrobacias sigue siendo desconocida por muchos cinéfilos

Esta mujer es una de las mejores dobles de riesgo de Hollywood, pero pocos reconocen su nombre
Debbie Evans en Matrix Reloaded (2003)
Publicado en Cine

No es un secreto, desde los primeros pasos del séptimo arte, los dobles de acción han sido parte de un sinnúmero de proyectos, sobre todo, del género acción. Aunque, durante los últimos años hemos sido testigos de la manera en la que la industria le ha dado mayor reconocimiento a estos especialistas, todavía existen nombres completamente desconocidos para el público general. Este es el caso de Debbie Evans, una de las principales actrices de acrobacia de Estados Unidos.

Nacida el 5 de febrero de 1958 en Lakewood, California, tuvo participación activa en numerosas competiciones de trial, un talento que heredó de su padre. Gracias a sus habilidades, ha realizado increíbles acrobacias a bordo de motocicletas. Asimismo, no solo llegó a convertirse en la mejor piloto femenina de su país y consiguió el patrocinio de Yamaha, también se abrió camino en el mundo de la actuación como doble en escenas arriesgadas.

Una infancia sobre dos ruedas

Debbie Evans

Evans manejando una motocicleta siendo apenas una niña

Evans creció en el entorno de las motocicletas. De esta manera, mientras su padre competía en diferentes circuitos, despertaba en ella la pasión por el motociclismo. Por ello, montaba magistralmente una moto desde los seis años. No pasó demasiado tiempo para verla medirse en carreras en la modalidad de enduro, donde presumía de competir contra hombres.

En 1978, viajó a Escocia para ser parte de un importante evento: el agotador Scottish Six Days Trial. A pesar de que contó con el apoyo de grandes patrocinadores, entre ellos, la prestigiosa empresa Gordon Farley Motorcycles England, pocos esperaban que la joven de 19 años, iba a lograr posicionarse en la cuarta posición en un circuito tan duro.

A partir de ese momento, llovieron las ofertas para acudir a múltiples espectáculos. En cada uno de ellos, Evans deleitó al público con sus acrobacias, especialmente, cuando realizaba el truco en el que colocaba su cabeza en el asiento del piloto, mientras mantenía el equilibrio de su motocicleta con el caballete levantado y realizaba una parada de manos. Esta acrobacia le valió su aparición en el documental Take It To The Limit (1980).

De las pistas y exhibiciones a los sets de grabación

Sin complicaciones, las habilidades de Evans capturaron la atención de los productores de cine. En 2003, las hermanas Wachowski le dieron su primera gran oportunidad como actriz de escenas de riesgo en Matrix Reloaded. El éxito alcanzado influyó en su decisión de dedicarse al trabajo a tiempo completo, incluso después de sufrir un accidente durante una acrobacia en la que terminó colisionando contra un vehículo en movimiento con una velocidad de nada menos que 75 millas por hora.

Si bien a lo largo de su paso por Hollywood ha participado en más de 200 películas y programas de televisión, la mayoría de las personas que conocen su nombre lo hacen gracias a aparición en la franquicia The Fast and the Furious como sustituta de Michelle Rodríguez.

Desafortunadamente, aunque profesionales como Evans son los verdaderos protagonistas en muchas de las secuencias más impactantes de nuestras historias favoritas, sus trabajos pasan desapercibidos. Este es el caso de Chad Stahelski, el doble de riesgo de Brandon Lee después de su trágica muerte durante el rodaje de la película El cuervo (1994), una de las mejores producciones de superhéroes antiguas, quien no fue reconocido en la industria hasta que asumió la dirección de la saga John Wick.

Una gran participación en la industria del cine

Debbie Evans

Evans probablemente ha participado en tus películas de acción favoritas

Evans se desempeñó como acróbata profesional hasta los 40 años. En 1998, regresó a sus orígenes después de haber estado alejada del deporte durante casi dos décadas. El Campeonato Mundial de Pruebas Femeninas fue el evento elegido para retomar su faceta como piloto, donde consiguió un admirable octavo lugar al final de la temporada.

Cinco años más tarde, su talento y experiencia fueron reconocidas a través de su inclusión en el Salón de la Fama de la Motocicleta de la AMA.

En definitiva, Debbie Evans es un ejemplo claro de la capacidad de las mujeres de destacarse en profesiones que suelen ser asociadas a los hombres. Igualmente, su carrera sirve como incentivo a un mayor reconocimiento hacia los especialistas en acrobacias y que se haga realidad la intención de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de incluir una categoría en su lista de premios.

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