Las 6 mejores películas de terror sobre traumas
Desde abuso y suicidio, hasta fobias y enfermedades mentales, estas producciones abordan el trauma de forma perfecta

Durante años, los traumas han servido de base en la creación de grandes historias dramáticas. Sin embargo, también se han convertido en el eje central de producciones verdaderamente aterradoras, sobre todo, cuando están inspiradas en hechos reales. Gracias a la evolución del género de terror, actualmente podemos disfrutar de un sinnúmero de películas que sumergen al espectador en un viaje profundo hacia la psique de personajes que viven algunos de los peores temores, a partir de situaciones traumáticas.
- Madre! (2017)
- El juego de Gerald (2017)
- The descent (2005)
- Midsommar (2019)
- El hombre invisible (2020)
- La semilla del diablo (1986)
Madre! (2017)

Una película inquietante y extravagante a partes iguales
De acuerdo a algunos comentarios de la crítica especializada, Madre! es de esas películas que intentas odiar, pero de la que terminas completamente enamorado. Considerada la película más perturbadora de Darren Aronofsky, consigue sacudir física y emocionalmente al espectador, mediante una propuesta visceral.
Jennifer Lawrence y Javier Bardem fueron los encargados de encarnar a Mother e Him, dos personajes que rompen los esquemas y presentan un tipo de trauma diferente, ya que representan a la Tierra y el daño que la actividad humana ocasiona sobre ella.
La historia sigue a una pareja cuyo hogar se convierte en un caos, después que el esposo permite la entrada a unas personas a las que no había invitado. A partir de ese momento, la conducta del hombre se vuelve extraña, e intenta echarlos a todos, una vez que no puede soportar el estrés. Gracias a este argumento, Madre! supone una especie de alegoría acerca de la forma en la que las personas continúan exprimiendo los recursos naturales.
El juego de Gerald (2017)
Mike Flanagan fue el encargado de dirigir esta adaptación de la novela homónima de Stephen King. Además de la impecable actuación de Carla Gugino, El juego de Gerald se ganó las alabanzas de la audiencia y de la crítica especializada debido a la forma perfecta en la que transmite la esencia de la trama original.
Durante el desarrollo de esta apasionante historia, se combina, en partes iguales, terror, suspenso, intriga y la cantidad exacta de gore espeluznante. El argumento gira en torno a una sobreviviente de abuso sexual que intenta conseguir su libertad. Jessie y Gerald Burlingame son una pareja que decide rentar una cabaña remota con el fin de avivar la llama de la pasión. Sin embargo, nada salió como esperaban.
El marido sufre una muerte repentina, mientras ella se encuentra esposada al marco de la cama, dando lugar a una verdadera lucha por sobrevivir. Lo más perturbador de la trama es que la protagonista se encuentra en una posición vulnerable con la que muchos pueden sentirse identificados.
The descent (2005)

Podrás sentir como te falta el aire con esta película
Lo que comenzó con una expedición espeleológica, se convirtió en la peor pesadilla de seis amigas. Dirigida por Neil Marshall, The descent es un thriller claustrofóbico, que entrelaza drama, suspenso, terror y ciencia ficción.
Ambientada en un escenario natural amenazante, la historia se intensifica cuando una roca se desprende y deja atrapadas a estas mujeres dentro de una cueva. Pero encontrar la salida sin ninguna clase de suministros es el menor de sus problemas, ya que son perseguidas por una raza de depredadores deseosos de consumir sangre humana. Tensa, sangrienta, brutal y perfecta para los amantes del gore, esta es la mejor forma de definir a una de las películas británicas más aterradoras de los últimos tiempos.
De forma casi instantánea, toca la fibra más honda de las personas que no soportan estar dentro de espacios reducidos, mientras aborda el tema del duelo y la negación.
Midsommar (2019)
Ari Aster dirigió esta producción inspirada en un festival sueco de la vida real. Lo más aterrador de Midsommar radica en que es un cuento de miedo a cielo abierto, y en plena luz del día.
El control narrativo se suma a un despliegue de escenas fuertes desde el punto de vista argumental. De esta manera, se convierte en un auténtico ejercicio audiovisual. La trama sigue a Dani, quien emprende junto a su novio Christian, un viaje con el fin de superar un evento traumático.
Desafortunadamente, la divertida escapada veraniega se transforma en una experiencia siniestra. Aunque se centra en el dolor de la protagonista después de la muerte de sus padres, Aster presenta varios personajes atormentados por el miedo, los traumas y las inseguridades.
El hombre invisible (2020)

Una de las películas que mejor ejemplifica el trauma
Ciencia ficción, terror e intriga van de la mano en una de las películas más destacadas de Leigh Whannell, donde se aborda el tema de la violencia de género y la depresión.
Aunque pertenece al género terror, la mejor parte de El hombre invisible es la forma en la que muestra las consecuencias del abuso. Cecilia ha estado atrapada durante mucho tiempo en una relación tóxica, por lo que el suicidio de su esposo representa la salida hacia una vida mejor.
Sin embargo, sus esperanzas se ven frustradas ante la sospecha de que todo fue un engaño, y que el abusivo hombre se encuentra vivo. Lo más perturbador de la historia es que expone, de forma cruda y directa, el estrés postraumático, de un problema que afecta a millones de mujeres alrededor del mundo.
La semilla del diablo (1986)
Roman Polanski llevó a la pantalla uno de los thrillers psicodramáticos más aterradores del séptimo arte. Esta adaptación de la novela homónima publicada por Ira Levin en 1967, sigue a Rosemary y Guy Woodhouse, una pareja ansiosa por tener un hijo.
Si bien sus nuevos vecinos los colman de atenciones, su nuevo hogar es un edificio sobre el cual, de acuerdo a un conocido, recae una maldición. De esta manera, una vez que la mujer se embaraza, inicia una conspiración siniestra, de hecho, lo único que recuerda es haber tenido intimidad con una extraña criatura, por lo que sospecha que su bebé no es normal.
Además de exponer traumas acerca de nacimiento, La semilla del diablo es un estudio directo hacia la degradación y las restricciones que sufren las mujeres.
En definitiva, no cabe duda que los traumas son un excelente punto de partida en la creación de historias espeluznantes, esas que no solo se convierten en películas perfectas para ver en Halloween, sino de thrillers psicológicos con los que resulta sencillo sentirse identificado.