DC: ¿cómo murieron los Robins de Batman y cómo han vuelto a la vida?

Batman siempre ha dejado en claro que prefiere trabajar por su cuenta. Sin embargo, nunca se ha cerrado completamente a recibir ayuda. Es por ello que lo hemos visto trabajar junto a otros superhéroes. Pero esto no es todo, ya que el detective murciélago cuenta con un gran equipo conocido como la Bat-Familia.

Muchos de los miembros de la Bat-Familia empezaron su camino en el heroísmo como Robins,, aunque uno de ellos ha incursionado en la villanía, compañeros que acompañaron a Batman a todo tipo de misiones peligrosas, por lo que muchos tuvieron encuentros cercanos con la muerte.

Hemos preparado este post para contarte cómo murieron los Robins y de qué forma han vuelto a la vida, ya que incluso han llegado a resucitar.

Dick Grayson murió temporalmente a manos de Lex Luthor

Dick tuvo la muerte más corta de todas

Dick Grayson es el primer Robin de la historia, pero también el primero en abandonar el puesto para convertirse en un héroe por su cuenta, llamándose Nightwing. Sin embargo, durante su época como Robin, este fue secuestrado y convertido en rehén. La situación escaló rápidamente, así que fue asesinado de forma momentánea.

Y es que en el cómic #6 de Forever Evil podemos ver que Dick ha sido secuestrado por el Sindicato del Crimen y lo han atado a una bomba que se detendrá únicamente si el corazón del joven también se detiene. En medio de la tensión, Lex Luthor decide matar al Robin y lo logró. Aunque fue temporalmente, ya que después le inyectó adrenalina para que su corazón volviera a latir. Esta muerte fue la más corta, pero el mundo la presenció.

La muerte de Jason Todd y su regreso a la vida son bastante turbios

Definitivamente, si hablamos de muertes de los Robins, debemos destacar la de Jason Todd, ya que es la más infame de todas. Esto ocurrió en la historia de Batman: Muerte en la Familia. En ese entonces, Jason era un niño que decidió buscar a su madre por todo el mundo. Sin embargo, este fue secuestrado por ella y entregado al Joker, quien lo torturó hasta que se cansó. El Joker lo golpeó con una palanca antes de asesinarlo con una bomba.

Tiempo después, en medio de los eventos de Crisis Infinita, Superboy-Prime golpeó con tanta fuerza el tejido de la realidad que modificó muchas cosas del universo de DC, trayendo así a la vida a Jason Todd, quien escapó de su tumba y se convirtió en Red Hood, un héroe que no duda en usar fuerza letal.

Tim Drake estuvo cerca de morir, pero fue salvado

Tim Drake estuvo a punto de inmolarse en un ataque de drones, pero fue rescatado

Tim Drake fue el siguiente Robin después de Jason Todd. Este estuvo a punto de morir cuando un montón de drones militares entraron en Gothan City. En este punto, Robin los obligó a marcarlo como su único objetivo y todos se lanzaron hacia él para explorar, lo que pudo haber sido una muerte segura. Sin embargo, el joven desapareció. Después se reveló que había sido secuestrado por el padre de Superman para mantenerlo prisionero por considerarlo muy peligroso. Posteriormente, fue rescatado por una versión oscura y mayor de sí mismo.

Stephanie Brown 'murió' para enseñarle una lección a Batman

Es posible que esta haya sido la Robin menos favorita de todos. De hecho, no era querida ni siquiera por los lectores. No importa cuánto intentara, las cosas simplemente no parecían funcionar. Así que Batman la despidió.

No obstante, Stephanie quiso demostrar su valor y puso en marcha un plan para destruir el crimen en la ciudad. Pero todo se salió de control y la chica fue asesinada por Máscara Negra. Posteriormente, la Dra. Leslie Thompkins le notificó a Batman que esta había muerto. Sin embargo, años más tarde, aparecería nuevamente como una adulta para convertirse en Batgirl, pues, en realidad, la Dra. fingió su muerte para enviarla lejos de la ciudad y que se recuperara, dándole una lección a Batman sobre utilizar a estos niños en sus peligrosas misiones.

La muerte de Damian Wayne alteró a Batman

La muerte de Damian no solo fue trágica, sino que llevó a Batman al límite

Cuando Batman y Damian estaban luchando en contra de la organización de Talia al Ghul, el joven Robin fue asesinado por su hermano clon, Heretic. Esta muerte fue presentada de forma sangrienta y brutal, así como también muy triste, pues el joven se había convertido en un auténtico héroe.

La muerte de Damian afectó mucho a Batman, quien se obsesionó con traerlo de vuelta, por lo que hizo que Jason Todd reviviera su trauma para intentar entender cómo resucitó. Lo mismo hizo con Superman, e incluso experimentó con Frankenstein para entender cómo estaba vivo. Al final, el héroe viajó al mundo de Darkseid y logró resucitar a Damian al combinar un cristal del caos y un poco de un Pozo de Lázaro.