Demon Slayer: el importante motivo por el que Muzan no quiere transformar a los Pilares en demonios
Muzan tiene una buena razón para no convertir a ninguno de sus mayores enemigos en demonio.
Son muchas las razones por las que los fans de Demon Slayer pueden considerar a Muzan uno de los villanos más intimidantes de toda la obra creada por Koyoharu Gotouge. Él no ha dudado en muchas de sus escenas mostrar su faceta más terrorífica, llegando a masacrar tanto a seres humanos como a demonios que le juraron lealtad eterna.
Algo que también hace aterrador a Muzan además de su comportamiento y su inmenso poder es su capacidad de convertir en demonios a los seres humanos inyectándoles su propia sangre. Esta habilidad ha hecho que los fans nos preguntemos en más de una ocasión por qué el conocido como Rey de los Demonios no ha intentado aún convertir en demonio a ninguno de los Pilares, los miembros más destacados del Cuerpo de Exterminio de Demonios.
La razón por la que Muzan no ha transformado a ningún Pilar en demonio
La respuesta detrás de esta cuestión es bastante sencilla y sirve además para evidenciar la gran astucia que posee este villano. Y es que Muzan no tiene ninguna duda de que convertir a un Pilar en demonio es lo mismo que dar un inmenso poder a alguien que te traicionará en cuestión de tiempo.
Akaza trató de convencer a Rengoku de que se convirtiera en demonio para ganar más poder
La naturaleza desconfiada de Muzan y el conocimiento que tiene sobre los Pilares harían que el Rey de los Demonios nunca confiase en este nuevo esbirro, algo que ya le sucede incluso con algunos de sus súbditos más fieles como Doma. Además, durante Demon Slayer pudimos ver que algunos demonios poseen un evidente odio hacia Muzan desde sus adentros. Muzan cree que un Pilar transformado jamás sentiría lealtad por él ni perdería completamente su humanidad.
Hay algo más a tener en cuenta de este villano. Él tampoco siente demasiada empatía por los demonios que crea y en más de una ocasión no ha dudado en arrebatarles la vida y torturarlos cuando fracasan en sus misiones. En la tercera temporada del anime no dudó en decapitar a Gyokko delante de todas las Lunas Superiores por mostrar un comportamiento que no le resultó de su agrado.
Esta temible acción palidece en comparación con una de las masacres que hizo en la primera temporada. Muzan no dudó en asesinar a casi todas las Lunas Inferiores al considerar que eran inútiles, demostrando de esta manera lo poco que valora tener más o menos demonios poderosos en sus filas. La única excepción podría ser Kokushibo, quien ha demostrado que valora por su increíble fuerza y sus capacidades.