La autora de Demon Slayer desveló el pasado de una Luna Superior fuera de la serie
El pasado de Gyokko fue uno de los interrogantes que dejó la tercera temporada del anime.
La tercera temporada de Demon Slayer finalizó con un último capítulo que muchos fans han considerado como uno de los más emocionantes y emotivos de toda la serie. El mayor conflicto de la temporada fue un encargo del mismísimo Muzan ordenando a dos Lunas Superiores una invasión a la Aldea de los Herreros en mitad de la noche, lugar imprescindible para conseguir el equipo de cazadores de demonios las armas que utilizan para contrarrestar a estos enemigos.
Y así fue como el anime nos deparó momentos tan emocionantes como los enfrentamientos protagonizados por los Pilares Mitsuri Kanroji y Muichiro Tokito quienes tomaron el relevo a Tengen Uzui como Pilares protagonistas. Además, se nos fueron presentadas dos Lunas Superiores: Hantengu y Gyokko contando este último con la particularidad que le diferencia de varios demonios.
El extraño pasado de la Luna Superior más extravagante de todas
Gyokko y su batalla final fueron una pequeña excepción en todo Demon Slayer. En Demon Slayer es costumbre que se comparta el pasado de un personaje que protagoniza una batalla importante para él, tanto si se trata de un humano como de un demonio.
El diseño del personaje de Gyokko es de los más llamativos de la serie
Con Gyokko no fue así y tras su batalla más importante pasamos rápidamente al combate protagonizado por Hantengu y Tanjiro, dejando el pasado de este personaje y sus motivos para ser un demonio como un enigma que la autora decidió aclarar en un fanbook oficial de Demon Slayer:
Gyokko vivía en las afueras de un pueblo de pescadores cerca de la costa y era mal visto por recoger repetidamente cadáveres de peces y hacer otras cosas extrañas. Perdió a sus padres a una edad temprana (salieron a pescar y nunca volvieron, sus cuerpos ahogados se encontraron dañados), por lo que los aldeanos mantenían las distancias pensando que había perdido la cabeza. Sin embargo, Gyokko mató a un niño del pueblo que vino a burlarse de él y lo metió en una vasija. Al parecer, quedó fascinado por la belleza de los cuerpos ahogados de sus padres.
Como ocurría con otros demonios vistos anteriormente la pérdida de seres queridos causó gran ira en su personaje y este giro del destino, así como las personas de su alrededor causaron una gran furia que le hizo convertirse en un asesino. Poco después ocurriría lo peor para el personaje:
Enfadados, los padres del niño apuñalaron a Gyokko con un tenedor de pesca de dos puntas. Lo dejaron morir allí y Muzan pasaba por allí, así que convirtió a Gyokko en un Demonio.
Este trágico pasado comparte similitudes con Daki, convertida en Demonio en un momento cercano a la muerte. Su fascinación por los cuerpos estaría presente una vez obtenida su forma demoníaca teniendo habilidades que recuerdan a su lugar de origen utilizando peces demoníacos como esbirros y llevando a cabo una invasión a la aldea con ellos.
Gyokko hizo su primera aparición en el primer capítulo de esta temporada en una reunión entre las Lunas Superiores desvelándose como uno de los más habladores y sociables junto a Doma. También se mostró voluntarioso ante Muzan y no dudó en llevar a cabo la misión que le encargó.
En su combate procuró mostrar a Tokito sus habilidades artísticas antes de combatir utilizando los cuerpos agonizantes de los herreros que enfrentó como esculturas demostrando así que estábamos ante la Luna más excéntrica vista hasta ahora.