Esto es lo que cambió Dragon Ball GT para siempre y lo convirtió en una joya

Dragon Ball GT ha estado en medio de la polémica desde hace mucho tiempo, pues los fans de la franquicia original no lo consideran canon, ya que Akira Toriyama ni su equipo de trabajo tuvieron participación en esta serie, por lo que no lo consideran digno de ser una secuela de Dragón Ball Z.

Asimismo, esta serie no ha sido del agrado de los fans debido a las incongruencias que tuvo está trama, pues dejaba muchas lagunas argumentales que no fueron reestructuradas o bien trabajadas durante el desarrollo de la serie, lo que dejó un amargo sabor de boca a los seguidores, que siguen rechazándola a cómo de lugar.

No obstante, hay algo aún rescatable de esta obra que la cambió para siempre y la convirtió en una joya. A continuación, te contamos los detalles.

Dragon Ball GT aprovechó este arco y lo convirtió en una joya

El arco argumental de los Dragones Malignos fue el más épico de esta serie

Si eres fan de la franquicia de Akira Toriyama, es probable que sepas que Dragón Ball GT no ha sido del agrado de todos los amantes de las aventuras de Goku y compañía y se niegan a aceptar que esta obra pertenezca al canon oficial. De hecho, ha sido tanta la negativa en cuanto a este anime que, actualmente poco se habla de él, pues ha sido prácticamente cancelado por los propios seguidores.

Se sabe que Dragón Ball GT fue creado por Toei Animation para satisfacer las necesidades de los fans que querían seguir conociendo y explorando diversas historias con Goku, ya que, para ese entonces, Toriyama había finalizado Dragón Ball Z y no tenía planes de seguir ampliando la franquicia con otro arco.

En vista de eso, Toei se puso manos a la obra y realizó Dragón Ball GT en el año 1996, emitiéndolo hasta finales de 1997. Sin embargo, esta serie no logró la recepción que esperaba la compañía, pues al no ser escrita por Toriyama, carecía de una buena trama o historia.

El bigote de Vegeta no fue del agrado de los fans

En parte, la baja receptividad y aceptación que tuvo Dragon Ball GT se debe a que la historia que narraba parecía un tanto ilógica para algunos, sin contar las modificaciones estéticas que de algunos personajes y que no fueron del agrado de los fans, como el legendario bigote que se dejó crecer Vegeta.

No obstante, no todo en esta obra fue negativo, ya que hubo un arco argumental que fue una completa joya, siendo lo más destacable de la misma.

Nos referimos al arco argumental de los Siete Dragones Malignos, pues en este se abordó de una manera muy interesante la historia que rodea a las esferas del dragón y las consecuencias que conllevan el constante uso de estas para deseos banales.

Los Siete Dragones Malignos, producto de la energía negativa que albergaban las esferas del dragon

Uno de los elementos con más lagunas argumentales de Dragon Ball siempre han sido las esferas del dragón, las cuales han sido utilizadas desde las primeras aventuras de Goku y sus amigos. Sin embargo, durante toda esta serie y su continuación, Dragon Ball Z, nunca se expandió este tema ni si existían consecuencias por utilizar estos objetos mágicos.

Pero es aquí donde entra Dragon Ball GT e intenta explicar un poco más sobre las esferas del dragón y las consecuencias que conllevan, no solo el utilizarlas para fines banales, sino también el depender de ellas.

Esto fue abordado de manera excepcional en este arco, ya que logró explicar con exactitud el riesgo que conlleva hacer un uso desmedido y desproporcionado de estos míticos objetos, pues como se pudo evidenciar que la sobrecarga de estas Esferas del Dragón puso al mundo al borde de un colapso al dar vida a estas malvadas criaturas al acumular demasiada energía negativa en su interior.

Sin dudas este es uno de los pocos arcos de Dragon Ball GT que merecen estar en el canon oficial de la franquicia, pues lograron ampliar y explicar de manera contundente y exacta los riesgos que conllevan hacer uso de un gran poder en la serie.