Electronic Arts confirma el cierre de hasta cinco juegos en los primeros meses de 2026
La compañía ya anticipó un gran adiós hace unos meses
Electronic Arts continúa con su proceso de clausura de títulos de su catálogo. Tras iniciar el año con diversos cierres, la compañía ha confirmado ahora que otros cuatro dejarán de estar disponibles el 16 de marzo de 2026. Con esta decisión, el total de cierres previstos para inicios de ese año asciende a cinco, incluyendo el ya anunciado fin de Anthem, de BioWare.
La editora no ha ofrecido motivos oficiales para estas medidas, aunque en la industria se asume que este tipo de cierres responden principalmente a licencias expiradas o al coste de mantener servidores en línea. En el caso concreto de los títulos afectados, se trata de un doble condicionante, ya que todos ellos combinan licencias con funcionalidades online. De esta forma, los juegos que dejarán de funcionar son:
- Dirt Showdown (2012), lanzado en PC, PlayStation 3 y Xbox 360.
- Dirt 3 (2011), disponible en PC, PlayStation 3 y Xbox 360.
- Grid Autosport (2014), que tuvo presencia en Nintendo Switch, dispositivos móviles, PC, PS3 y Xbox 360.
- Grid 2 (2013), publicado para PC, PS3 y Xbox 360.
Los cuatro títulos fueron desarrollados por Codemasters, estudio británico especializado en juegos de conducción que EA adquirió en 2021. A estos cierres se suma el de Anthem, programado para el 12 de enero de 2026. Lanzado en 2019 con gran expectativa como la nueva gran apuesta multijugador de BioWare, el título nunca logró despegar comercial ni críticamente, hasta convertirse en uno de los mayores tropiezos de la compañía en la última década.
El cierre más sonado de EA
Si bien la desaparición de los juegos de Codemasters no tendrá un gran impacto —se trata de títulos con más de diez años en el mercado y con comunidades prácticamente inexistentes en 2025—, la pérdida de Anthem resulta más significativa, tanto por la magnitud del proyecto como por el peso del nombre de BioWare en la industria.
De este modo, EA arranca 2026 con una limpieza de catálogo que, si bien afecta sobre todo a juegos ya desfasados, también deja en evidencia los desafíos que enfrenta la compañía a la hora de sostener proyectos de gran escala que no logran consolidarse en el mercado.