Star Wars Jedi: Survivor guarda un secreto que pocos seguidores conocen
Este es uno de los easter eggs más extraños y divertidos de Star Wars Jedi: Survivor

Las aventuras de Cal Kestis no se limitan a épicas batallas y emocionantes exploraciones planetarias en Star Wars Jedi: Survivor. Entre las sombras del juego se esconden secretos divertidos y sorprendentes que solo los jugadores más observadores pueden descubrir. De hecho, hay varios mapas que son mucho más grandes y explorables que la anterior entrega, mientras que también hace que se sienta inmersivo con todas las acciones que podemos hacer en estos mundos.
Pues bien, uno de estos tesoros ocultos es un peculiar encuentro que involucra a droides artistas, un Mogu confiado y una dosis de humor inesperado. Probablemente, el siguiente easter egg que te mostramos sea uno de los más divertidos que verás en toda la historia del título y también uno de los más inesperados entre los mejores juegos de Star Wars.
Un easter egg de Star Wars Jedi: Survivor muestra a un Mogu siendo retratado por droides

el easter egg de Harvest Ridge es uno de los mejores del juego
Para embarcarse en esta búsqueda hilarante del easter egg es necesario dirigirse al planeta Koboh, específicamente al área de Harvest Ridge. Aquí hay que adentrarse en unas cuevas ubicadas en el lado norte de la región con una montura. Una vez adentro, la clave para progresar está en las ramas que penden del techo. Al desmontar, Cal tiene la capacidad de trepar hasta alcanzar una fuente de luz ubicada en la pared izquierda de la cueva.
Ahora hay que prestarle atención a la pared hasta que el personaje se tope con una grieta oculta llena de plantas. Este es el portal que conduce al huevo de Pascua, un sendero secreto que se extiende hasta ver uno de los escenarios más divertidos del título, pues en el interior hay una sala secreta donde se puede ver a un grupo de droides reunidos alrededor de tres lienzos, cada uno de ellos dedicado a la creación de un retrato único. Pero no se trata de cualquier sujeto, sino de un Mogu particularmente seguro de sí mismo que posa con arrogancia para sus admiradores droides.

En una extraña cueva de Harvest Ridge hay droides retratando a un Mogu
Este easter egg, más allá de su carácter cómico, sirve como un recordatorio de la creatividad y el humor que impregnan el universo de Star Wars Jedi: Survivor. Sin duda, es un detalle que, a pesar de su naturaleza escondida, enriquece la experiencia general del juego, invitando a los jugadores a explorar cada rincón y descubrir las sorpresas que se esconden fuera del argumento principal.
El descubrimiento de este huevo de Pascua por parte de la comunidad abre las puertas a la posibilidad de que existan muchos más secretos similares dentro del juego que poco a poco irán saliendo a la luz. Evidentemente, esta es una de las cosas que convierten a Star Wars Jedi: Survivor en uno de los mejores juegos de mundo abierto de la historia.