Netflix adquiere Warner Bros. por 82.700 millones de dólares, la mayor operación en la historia del entretenimiento
Se desconoce qué sucederá con todos los estudios de Warner Bros. Games
Netflix ha salido victoriosa en lo que parece ser la subasta de Warner Bros. Discovery. Según ha podido saber Deadline, un simple pero importante acuerdo promete redefinir el mapa del entretenimiento global. La oferta del gigante del streaming rondaría los 28 dólares por acción, mayoritariamente en efectivo, situándolo al frente de una subasta vertiginosa que asciende a 82.700 millones de dólares.
La propuesta del líder mundial del streaming terminó imponiéndose a Paramount y Comcast en una operación que incluye un breakup fee de 5.000 millones de dólares en caso de que la operación se derrumbe. El proceso de venta se activó en octubre, cuando presentó tres ofertas consecutivas. Warner buscaba sellar un acuerdo antes de finales de diciembre y ahora parece encaminado a hacerlo con un comprador inesperado.
La propuesta de Netflix se centra en adquirir los estudios Warner Bros. y los activos de streaming, incluido HBO Max. Paramount, en cambio, había ofrecido comprar la totalidad de WBD. De esta forma, habría que esperar más detalles para saber si Warner Bros. Games se vería afectada por este importante movimiento.
¿Qué sucederá con Warner Bros. Games?
La situación de la filial de videojuegos de Warner Bros. tras el acuerdo se encuentra en un punto de incertidumbre estratégica. Aunque la operación abarca todo el negocio cinematográfico y de streaming, incluyendo propiedades valiosas como Harry Potter, el universo DC y Juego de Tronos, la comunicación oficial no detalla qué ocurrirá con estudios clave como NetherRealm, Rocksteady, Avalanche o TT Games.
Estos equipos, responsables de franquicias de gran peso como Mortal Kombat, Batman: Arkham y Hogwarts Legacy, representan una de las divisiones más sólidas del conglomerado, pero la ausencia de menciones sugiere que Netflix aún no ha definido públicamente su plan para integrarlos o reestructurarlos, tal y como recoge VGC.
Este silencio contrasta con el historial reciente de Netflix en videojuegos, marcado por avances limitados y giros internos. Hasta ahora, la compañía ha apostado por experiencias modestas, enfocadas en el entorno móvil y dentro de la propia app, lejos de los grandes desarrollos AAA que caracterizan a Warner Bros. Games.
De esta forma, la adquisición podría suponer una oportunidad para que Netflix dé un salto ambicioso hacia la producción de videojuegos de gran escala. Sin embargo, también podría convertirse en un foco de ajuste o recorte si la empresa decide priorizar su negocio principal de streaming, especialmente considerando el escrutinio regulatorio que enfrenta el acuerdo y la reorganización previa de su rama interactiva.