Chainsaw Man: estos son algunos de los peores momentos que ha vivido Asa Mitaka

Chainsaw Man, el controvertido manga de acción creado por Tatsuki Fujimoto, ha recibido multitud de premios y un gran número de elogios por parte de la crítica profesional. Su personaje principal se aleja en gran medida de lo que solemos ver en el género shonen y posee enfrentamientos contra demonios increíblemente poderosos.

Tras presentar a un carismático grupo de cazadores de demonios y cerrar con broche de oro la Saga de Seguridad Pública, Chainsaw Man sorprendió a sus lectores con una segunda parte que exploró aún más la compleja evolución psicológica de Denji y los poderes ocultos del Demonio Motosierra. Esta parte también ha supuesto el regreso de enemigos muy poderosos y la incorporación de nuevos personajes.

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Asa Mitaka ha sido, sin duda alguna, una de las incorporaciones más acertadas de esta segunda etapa de la historia. De personalidad introvertida y pocas habilidades sociales, Asa se presentó como una chica que sentía un profundo odio hacia todo lo relacionado con el Hombre Motosierra. Su evolución ha sido constante, y ha tenido la desdicha de vivir momentos sumamente trágicos e incómodos. En este artículo echaremos la vista atrás y destacaremos algunos de ellos.

Las siguientes líneas incluyen spoilers del manga de Chainsaw Man.

Asa es perseguida por el Demonio de la Caída

El Demonio de la Caída atormentó la mente de Asa

Para tener bajo su control al Demonio de la Guerra, Kiga pidió la ayuda del Demonio de la Caída, un enemigo extremadamente peligroso que apareció cerca de Asa y tenía como objetivo convertir a la chica en el plato principal de un banquete que se llevaría a cabo en el infierno.

El Demonio de la Caída persiguió a una aterrada Asa mientras intentaba convencerla de que lo mejor para ella era entregarse a sus miedos más profundos. Cuando la tuvo en sus brazos, el Demonio de la Caída manipuló la mente de Asa y la obligó a recordar uno de los momentos más dolorosos de su vida.

Asa mata accidentalmente al Demonio Pollo

Asa nunca se ha sentido cómoda con sus compañeros de clase y prefería mantener cierta distancia con cada uno de ellos. Un día, el profesor llevó al aula al Demonio Pollo, un demonio incapaz de hacer daño a los seres humanos. El plan era que todos los alumnos cuidaran de él hasta el día en el que tuvieran que comérselo, pero acabó siendo tan querido que se convirtió en un compañero más de clase.

Un día, al ver a Asa apartada del resto, el Demonio Pollo se posó amistosamente en los brazos de la chica y la invitó a jugar con él y con los demás. Asa se acercó muy feliz a sus compañeros, pero un tropiezo hizo que cayera encima del Demonio Pollo, aplastándolo y matándolo al instante. Esto enfureció y decepcionó a muchos de sus compañeros, y algunos llegaron a considerarla una asesina. Movida por el fuerte sentimiento de culpa, Asa decidió dejar de intentar socializar con los demás.

La muerte de Crambon

Asa perdió a su mascota de forma injusta

Otra escena particularmente oscura que afectó anímicamente a Asa. Tras quedarse huérfana, Asa pasó un tiempo en un orfanato con otros chicos que estaban en una situación similar. La joven tampoco fue muy social en esta parte de su vida y prefería pasar su tiempo con Crambon, un gato que logró proteger durante el ataque del Demonio Tifón.

Una de las encargadas del orfanato le dijo a Asa que algunos niños eran alérgicos al pelaje de Crambon, y que lo mejor sería entregarlo a un amigo que ella conocía. Pensando en lo mejor para el felino, Asa decidió entregárselo con la importante condición de que hicieran muy feliz a Crambon. Sin darse cuenta, Asa había sellado el destino de Crambon, ya que las verdaderas intenciones de esta mujer eran acabar con la vida del animal.

Asa presencia la muerte de su madre

Este momento marcó bastante la vida de Asa y ha provocado una fuerte sensación de desamparo en ella. Mientras huía del Demonio Tifón, Asa tuvo la mala suerte de caer al suelo y quedarse completamente expuesta al ataque de este enemigo. Su madre corrió a ayudarla, pero un vehículo que volaba alrededor cayó encima de ella, matándola al instante.

Cuando el Demonio Tifón se marchó, una desamparada Asa se quedó sentada entre los escombros, llorando mientras se culpaba por la muerte de su madre. Esta situación convirtió a Asa en una chica huérfana y probablemente sea uno de los motivos por los que siente un odio tan profundo hacia los demonios.

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