Los 6 villanos más malvados de Breaking Bad

Breaking Bad, aunque podría estar basada en una historia real, es una serie tan repleta de villanos que es difícil reducir la lista a una poca cantidad de ellos, sin embargo, de todos ellos solo unos pocos pueden ser destacados como personajes realmente malvados. Incluso, Walter White también lo es, ya que muchas de sus decisiones son éticamente cuestionables, pero aun así, a lo largo de la serie recibe el apoyo incondicional de sus fans.

Sin embargo, cualquiera que se interponga en el camino de Heisenberg es considerado como un antagonista. Y sin duda, esta es una de las series en donde cada uno de estos villanos ataca a Walter White desde todos los flancos y de todas las maneras posibles, pero, estos son algunos de los peores de todos:

Jack Welker

Es un personaje terriblemente desquiciado

Welker es el líder de una banda neonazi, y quizá uno de los personajes más malvados de Breaking Bad. Se trata de un individuo cuyo movimiento es su única motivación, y a diferencia de lo que puede parecer, que su incentivo es el dinero, realmente el orgullo y placer es su verdadero combustible.

Si le apetece matar, lo hace; si quiere tomar algo, se lo lleva; todo ello porque cree que lo merece.

Es un sádico por excelencia, que disfruta de la tortura y la humillación de quien se interponga en su camino. Además, preparó a su sobrino Todd Alquist para ser un asesino a sangre fría como él, por lo que sin duda es uno de los villanos más cualificados para entrar en este top. Su falta de remordimiento y su placer maníaco por causar dolor es una muestra de que se trata de la maldad personificada.

Héctor Salamanca

Aunque esté en una silla de ruedas, no deja de ser terriblemente peligroso

Aunque en Breaking Bad vemos a Héctor Salamanca postrado en una silla de dudas y que para comunicarse debe tocar una campana, realmente esto no le resulta un problema cuando se trata de encontrar forma de acabar con sus enemigos. Héctor es un hombre iracundo, violento, que se complace con hacer daño a los demás.

La edad tampoco es otro impedimento, expresa su rabia y ejecuta planes malvados de la manera más extrema posible, como lo vimos en última aparición. El anciano don de la familia Salamanca es uno de los más temidos, y sin duda,nunca dejó que alguien olvidara su nombre.

Y a pesar de que se trate de un hombre que siente respeto y amor por la familia, lo que de cierta forma le confiere cualidades humanas, estos valores se tuercen por la manera tan brutal de responder ante los problemas, y claro, por su codicia insaciable.

Todd Alquist

Al igual que su tío, es un personaje violento

Al igual que su tío, es un personaje que carece totalmente de conciencia y empatía. Si no estuviese viviendo una vida en el crimen organizado, probablemente sería un terrorista o un asesino en serie cuya única motivación sería divertirse cuando se encuentra aburrido. Probablemente, recordemos a Tedd por el atraco al tren, donde todo parece ir bien hasta que decide asesinar a un joven testigo.

Además, la interpretación de Jesse Plemons es perfecta, ya que transmite al personaje de psicopatía, es decir, parece que Todd no es consciente de las maldades que hace, especialmente cuando se trata de castigar a Jesse Pinkman. Todd asesina a sus víctimas sin una gota de remordimiento, lo hace de una forma tan natural que precisamente esto es lo que lo hace tan malvado y peligroso.

Existe una despreocupación y una creencia genuina de que lo que hace está bien que sin duda, Todd es alguien que nunca querrías de amigo, o peor, de enemigo.

Los primos (Marco y Leonel Salamanca)

Estos primos, además de ser peligrosos, hasta lucen bastante tenebrosos

Este par de gemelos es lo más cercano en la serie a una pareja de Terminator humanos, aunque su forma de caminar nos haga dudar de si son humanos. Pero, ya en serio, tuvieron una infancia extremadamente dura, y esto les dejó una cicatriz bastante notoria. Y por supuesto, al ser sobrinos de Héctor Salamanca, son conocedores de primera mano de la violencia, y aceptan que su trabajo conlleva un derramamiento de sangre grande, y esto no es un problema.

Ejercen sus funciones de sicariato para el cartel de droga para el que trabajan, y esto lo hacen sin compasión, sin un ápice de empatía, solo quieren realizar el trabajo para el que han sido contratados. Además, son un par de personas que tiene un enorme sentido de justicia, aunque de forma extraña y desordenada, lo que hace que se sientan constantemente agraviados. Pero, cuando deciden vengarse, son como un tren, y nada podrá detenerlos hasta que logren su objetivo.

Gustavo Fring

Aunque es uno de los personajes más peligrosos, no podemos odiarlo

Por lo que nos deja ver la serie, Gus Fring pudo haber sido en algún momento una buena persona, pero su vida en el crimen lo endurecen y han creado a un monstruo irreconocible, un hombre que ya no existe.

Es uno de los capos principales de la serie Breaking Bad, y probablemente uno de los mejores villanos de televisión, uno de los más reconocibles de la última década, y que a pesar de lo odiamos (aunque no de la misma manera en la que odiamos a Skyler), no podemos no sentirnos impresionados.

Cada uno de sus métodos son planeados con extrema cautela, y logró construir un imperio increíblemente difícil de infiltrar. Encubre su actividad de narcotraficante poseyendo negocios legítimos y haciendo obras de caridad. Sin embargo, su corazón y su conciencia han sido contaminados profundamente con perversión, y esto es algo en lo que pudo haberse convertido Walter White.

En cualquier caso, lo cierto es que Gus no mata cuando no siente que tiene que hacerlo, esto lo hace diferente al resto de sádicos de esta lista, gracias a su estilo calculador. Sin embargo, cuando llega el momento de hacerlo, su inexpresivo rostro no duda en ningún momento, y hará lo que sea necesario para lograrlo.

Walter White

Sin lugar a dudas, Walter White es el personaje más peligroso

Sin duda hay muchos villanos en la serie Breaking Bad y en el spin-off de Better Call Saul –y puede que haya alguno nuevo–, pero al final, el peor villano fue aquel que fue presentado como héroe, y cuando llegamos al tramo final de la serie, Walter White se había convertido en su peor enemigo.

Walter comenzó en el terrible negocio de las drogas porque quería mantener a su familia cuando él ya no estuviese, pero al final admite que construyó su imperio de la metanfetamina azul para sentirse poderoso y acariciar su propio ego. Y cuando algo se interponía en su paso, era capaz de todo para lograr su propósito, llegando a extremos imperdonables, como cuando envenenó a Brock. Incluso, el autor de Juego de Tronos, George R.R. Martin, expresó por medio de una entrevista que W.W era un monstruo más grande que nadie en Poniente, por lo que sin duda, es el villano más malvado de la saga.