La compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft será revisada por Estados Unidos y este es el motivo
No es tan fácil realizar este tipo de compras.
La noticia del mes y del año ha sido sin duda la compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft, siendo esta una adquisición con la que ni siquiera Sony puede competir pese a haberse hecho con Bungie. Y es que, a fin de cuentas, es mucho dinero el que se está moviendo, de la misma forma que muchas licencias pasarían a mano de Microsoft, lo que puede llevar a diversos problemas, por lo que es objeto de estudio.
Estos no es un procedimiento para nada raro, ya que, sin ir más lejos, se ha podido ver como ocurrió lo mismo tras la compra de Fox por parte de Disney, ya que se pretende evitar cualquier situación de monopolio que desequilibre el mercado. Es por ello que la Comisión Federal de Comercio (FTC según las siglas inglesas), se encargará de revisar esta transacción para evitar estos monopolios en Estados Unidos.
La compra de Activision Blizzard no será efectiva hasta que se realice la revisión antimonopolio por la FTC
Esta revisión, que por otro lado sigue los procedimientos legalmente establecidos según la legislación de Estados Unidos, ha sido informado por Bloomberg, afirman que será la FTC y no el Departamento de Justicia quien llevará a cabo la inspección. Ante esto, ninguna de las entidades privadas (Activision Blizzard y Microsoft) e instituciones públicas han hecho una declaración al respecto.
Sea como fuere, hay que recordar que la compra de Activision Blizzard ha sido por unos 68.700 millones de dólares americanos, estableciéndose así como una de las mayores adquisiciones dentro de la industria del ocio y el mayor desembolso dentro de la del videojuego, quedando muy por encima de lo visto con Take Two y Zynga durante este mismo mes de enero.
Por lo demás, habrá que ver cual es el resultado de esta revisión, ya que, en caso de que no den el visto bueno, la compra se echaría para atrás. Por otro lado, tanto la FTC como el Departamento de Justicia ya avisaron de que las posibles compras futuras empeorarían una situación que no dejaba de ir a más en 2020 y en 2021 con muchas grandes compañías adquiriendo un estudio tras otro.