The Elder Scrolls VI da la pista definitiva para su llegada a PS5

En las últimas horas se está generando un clima muy interesante en el entorno de Xbox, ya que todo apunta a que la compañía de Redmond estaría preparando un bombazo en relación a la llegada de sus juegos exclusivos a plataformas PlayStation y Nintendo. Mientras que en un principio se comentaba que serían títulos de carácter menor como Hi-Fi Rush o Sea of Thieves, ahora se habla de que incluso Starfield, Hellblade II e incluso sagas ilustres como Halo y Gears of War podrían coger el mismo camino. Algo que abre la puerta a otro de los grandes proyectos.

Esto se debe a que la posible presencia de The Elder Scrolls VI en PS5 lleva siendo objeto de debate en el sector desde hace ya algunos años, sin que ninguno de los responsables se lanzara a dar una respuesta definitiva al respecto. Ahora, con el cambio de rumbo que parece estar tomando Xbox en relación a sus licencias exclusivas, la posibilidad de que haya una versión de la sexta entrega de la saga en la consola de actual generación de Sony está más abierta que nunca.

Habrá que esperar para saber el modo en el que se realiza este anuncio por parte de la división de juegos de Microsoft, ya que se desconoce si se producirán lanzamientos simultáneos o serán exclusividades temporales en consolas Xbox que acaben llegan más tarde al resto de plataformas. Desde luego, sea lo que sea lo que estén preparando, promete cambiar la industria para siempre.

Microsoft podría anunciar su nuevo plan a finales de febrero

Por el momento todas estas informaciones no son más que rumores, aunque llegan de fuentes tan cercana a la división Xbox que parecen prácticamente un hecho. Por lo tanto, solo queda esperar a la confirmación oficial por parte de la compañía norteamericana, algo que podría suceder a finales de mes, antes de dar inicio al próximo año fiscal de la firma. De este modo, Microsoft podría pasar a ser el mayor third party de toda la industria.

Quedaría por ver cómo afectaría este movimiento a la división de consolas de la compañía, ya que las ventas de Xbox Series X|S se situarían por debajo de lo esperado, lo que podría estar motivando esta decisión.