¿Fue realmente el Conde Dooku un villano en Star Wars?
Las ambiciones de Dooku nunca fueron tan oscuras como recuerdas.
Star Wars siempre ha sido una franquicia donde no han faltado grandes actores y actrices en su reparto. En las 3 primeras películas tuvimos a veteranos como Alec Guinness o iconos como Harrison Ford y en la trilogía precuela el listón llegó a aumentar gracias a la presencia de Ewan McGregor, Liam Neeson o el fallecido Christopher Lee.
Christopher Lee se encargó de interpretar al Conde Dooku, un habilidoso Sith que aún hoy sigue siendo sujeto de debate entre los fans de la franquicia. Y no es para menos, ya que analizando detenidamente la trayectoria del personaje podemos apreciar que su figura como antagonista no ha sido nunca tan evidente como parece.
Las ambiciones de Dooku nunca fueron peores que las de Darth Sidious
El Conde Dooku fue junto a Jango Fett el principal antagonista de El Ataque de los Clones, película cuya recta final se encargó de mostrarnos el surgimiento de las Guerras Clon en todo su esplendor. Estas escenas se intercalarían con el enfrentamiento entre Dooku, Anakin y Obi-Wan, demostrando el Sith una amplia superioridad ante ellos e incluso llegando a mutilar fácilmente la mano de Anakin en un evidente guiño a El Imperio Contraataca.
Dooku derrotó a Anakin y a Obi-Wan, pero no mostró gran interés en arrebatar la vida a ninguno de los dos
Sin embargo, esto no es lo único que unió a Dooku con Anakin. Al igual que sucedió con el mismísimo futuro Darth Vader, el camino de Dooku al Lado Oscuro fue motivado en gran parte por sus diferencias con el Consejo Jedi y por poseer una ambición que únicamente vio capaz de conseguir uniendo sus fuerzas con Darth Sidious.
A diferencia de Darth Maul, Dooku tuvo una clara oportunidad de asesinar a Obi-Wan e incluso a Anakin, pero finalmente prefirió mostrar una actitud sosegada que no coincide con el odio constante que sienten los Sith.
En esta parte de la película Yoda comentó algo muy interesante: Dooku fue un talentoso padawan que él mismo entrenó, dejándonos claro que Dooku no fue siempre un Sith consumido por la oscuridad, de hecho, hubo luz en su interior durante una buena parte de su vida y no le avergüenza recordar su pasado como Jedi a pesar de admitir sentirse ahora alguien más poderoso que antes.
Dooku fue el respetado maestro Jedi en el pasado
En este punto nos tenemos que adentrar en obras anexas a las películas principales de Star Wars. La venganza de los Sith contó con una novelización que nos brindó más información acerca de Dooku. Este Sith estaba interesado en formar una alianza con Obi-Wan y hacer que se uniese al Lado Oscuro valorando el gran talento que demostró tener ante él.
El futuro emperador hace tiempo que no sentía el más mínimo interés por Dooku, su objetivo era Anakin y su plan era que este Jedi asesinase a Dooku para hacer más fuerte la oscuridad que sentía crecer en el interior del prodigioso Skywalker.
Dooku fue traicionado por su propio maestro
La muerte de Dooku fue la mayor demostración de lo diferente que era él y Palpatine. Mientras que el Lord Sith no dudó en sacrificar a su aliado como una parte más de sus planes las ambiciones de Dooku no tenían por qué incluir la extinción de los Jedi ni trató de priorizar en ningún momento la muerte de sus enemigos.
Al igual que señaló Anakin en más de una ocasión, Dooku era consciente del enorme poder y la corrupción que había en el Consejo Jedi y no toleraría que el Imperio Galáctico tuviese un comportamiento tan autoritario ni similar a lo que vio en los Jedi de alto rango. Tampoco demostró los mismos niveles de ambición ni el narcisismo de Palpatine, en realidad, buscaba una reforma en la galaxia en lugar de una dictadura. Para él, el alzamiento del Imperio Galáctico era necesario para contrarrestar el desmedido poder que tenía el Consejo Jedi en ese entonces.
Su objetivo era alcanzar un equilibrio de poderes que él consideraba justo para todos y próspero para el futuro de toda la galaxia. El personaje se convirtió finalmente en otra víctima más de la tiranía de Palpatine y estos objetivos que tenía, muy diferentes a los de su maestro Sith, nunca llegaron a hacerse realidad.
